La denominada "Marcha blanca" de trabajadores y usuarios de la sanidad madrileña contra las medidas del Gobierno regional ha protestado por las calles de Madrid en varias columnas que han confluido en la plaza de Cibeles, desde donde han marchado hasta la Puerta del Sol.
Trabajadores sanitarios y sindicatos han marchado ataviados con batas blancas, silbatos, y camisetas de varios colores -azules, verdes o rojas en función de si son personal sanitario o no- en las que figura la leyenda "Sanidad pública para tod@s" y, por detrás, "Se vende sanidad pública", mientras que algunas llevan además el nombre del hospital.
Al grito de "sanidad, unidad", un grupo de manifestantes asegura que "tienen que unirse contra unos recortes que consideran brutales y que van a provocar que se pierdan prestaciones a nivel de usuario". Otra trabajadora ha señalado a Efe que "se quieren cargar la sanidad, algo que se conseguido entre todos desde hace más de 30 años".
Según dice, no se debe ir hacia la gestión privada de los hospitales públicos porque, a su entender entraña una privatización de los " hospitales de la Comunidad de Madrid", y creen además que "los ciudadanos están concienciados porque saben lo que se pierden si esto sigue adelante".
También consideran que los cuatro días de huelga convocados en el sector -26 y 27 de noviembre y 4 y 5 de diciembre- son "la única forma de que vean que vamos en serio y que no es algo puntual", decía una de las manifestantes.
La manifestación, bajo el lema "La sanidad pública no se vende, se defiende", ha sido convocada por distintas plataformas de trabajadores del sistema sanitario, en protesta por las medidas del Plan para la sostenibilidad de la sanidad anunciado por el Gobierno regional el pasado 31 de octubre.