El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, afirmó este jueves que la Sociedad de Gestión de Activos (SGA), como se ha denominado oficialmente al banco malo, estará "plenamente operativa a principios de diciembre".
Así lo indicó en el Pleno del Congreso de los Diputados durante el debate del real decreto de reestructuración del sistema financiero y de resolución de entidades de crédito, que recoge el esquema básico del banco malo que gestionará los activos tóxicos de entidades con problemas. En esta norma se da una "cobertura legal mínima" a la SGA, que aún queda a expensas de un desarrollo reglamentario posterior más detallado.
Impacto limitado
De Guindos defendió esta fórmula, ya que es la que tendrá un impacto limitado en el bolsillo de los contribuyentes. Con esta nueva reforma financiera, el Gobierno cumple compromisos adquiridos con la UE en el memorando de entendimiento para recibir la asistencia financiera, de hasta 100.000 millones de euros.
Este real decreto, y los dos que le preceden, "nos llevará a un sector financiero más eficiente, saneado e integrado, con entidades más solventes", aseguró el titular de Economía, quien recordó que este es el paso previo para que los bancos estén en "condiciones de conceder financiación a la economía real".
El responsable de Economía explicó que esta norma va "más allá de los problemas concretos de una entidad determinada" y que se trata de impedir la "interrupción" de la actividad de bancos podrían afectar a la economía. Además, De Guindos aseguró que se busca "limitar al máximo el uso de los recursos públicos" en el proceso de reestructuración financiera.
El ministro defendió que con las normas aprobadas por el Gobierno se lleva a cabo un "saneamiento integral" del sistema, y se "ataca de raíz" el problema de "irreal valoración" de los activos ligados al crédito promotor.
Esta norma es "un hito fundamental en nuestro ordenamiento jurídico", indicó el ministro, quien agregó que de haber contado con esta herramienta al inicio de la crisis financiera el coste para el contribuyente "hubiera sido menor" y no se tendría que haber acudido a la asistencia de la UE.
La ayuda en noviembre
Así lo ha explicado De Guindos, quien ha confirmado también que a finales de septiembre se conocerán los resultados de las necesidades de capital de la banca que publicará la consultora Oliver Wyman, banco a banco.
Además, las entidades del grupo 1 según el memorándum de entendimiento de ayuda europea a la banca española", es decir, aquellas intervenidas por el FROB, recibirán la ayuda pública una vez la Comisión Europea apruebe sus programas de reestructuración a principios de noviembre.
En el caso de las entidades del grupo 2, aquellas que no pueden asumir su déficit de capital sin ayudas públicas, el proceso de aprobación de su plan de reestructuración se prolongará hasta finales de diciembre.
Por último, en el caso del grupo 3, que son aquellas entidades que se prevé puedan hacer frente a sus déficit de capital por sí mismas, tras la presentación de su plan de recapitalización en octubre, tendrán hasta junio para demostrar que pueden hacer frente a sus necesidades de capital sin apoyo público, ha asegurado el ministro.