Sin la presión de los mercados, con la prima de riesgo desinflándose y en niveles que hacía meses que no se veían, el Gobierno se dejó de mensajes estridentes -de hecho, casi calcó las palabras de Mariano Rajoy ante Angela Merkel- e insistió en ganar tiempo y en empaparse bien de la documentación recibida por el Banco Central Europeo antes de elevar ninguna petición al organismo que dirige Mario Draghi.
Aunque la opción del rescate es tan real como que esta misma semana varios miembros del gabinete la dieron por hecha, el Ejecutivo ahora opta por alargar en el tiempo la difícil situación. Y si fuera posible, aunque en privado admiten que será difícil, por no pasar por ese trago. En principio antes se celebrarían las elecciones del 21 de octubre, que afectan a País Vasco y Galicia. Cabe recordar que la ayuda, se llame como se llame, traerá en principio condiciones y con ello nuevos ajustes.
Hasta en ocho ocasiones se le abordó a la vicepresidenta por este extremo en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en el que se hizo balance de la cumbre hispano-germana celebrada en la víspera. Soraya Sáenz de Santamaría fue inamovible: "Cosas tan importantes para el interés general deben analizarse con calma y con prudencia. No se pueden tomar a bote pronto o de la noche a la mañana. El Gobierno lo analizará con rigor, con detalle y sopesando todos y cada uno de los elementos", dijo en una de las ocasiones. Y así sucesivamente.
La portavoz de Rajoy puso como base "los intereses de futuro de todos los españoles", y de ahí que llamara constantemente a la "prudencia" y a la "calma". Más aún si quien se pronuncia es un cargo político, en referencia concreta a Alfredo Pérez Rubalcaba. Lo importante en su opinión es que tanto el BCE como Alemania han pronunciado sendos discursos a favor de la irreversibilidad del euro y que éstos han servido de calmantes en los mercados.
El calendario se convirtió, por una vez, en aliado. Sáenz de Santamaría puso en conocimiento que los próximos 14 y 15 de septiembre están convocadas reuniones del Eurogrupo y el Econfin y que entonces se irá teniendo "conocimiento certero" de los detalles del rescate. Más tiempo para evitar la difícil situación, si es que llega.