La Comisión Europea (CE) no mantiene negociaciones con España sobre ninguna asistencia más allá de la ya concedida para apoyar a los bancos, y no espera que el país vaya a solicitar un nuevo programa a corto plazo, ha asegurado este viernes el portavoz comunitario de Asuntos Económicos, Simon O'Connor. Ayer, Reuters y Europa Press publicaron que España negocia las condiciones de un rescate total del país, aunque el Ejecutivo español no ha tomado aún la decisión final para solicitarlo.
"Ya hay un memorando acordado con España para la ayuda financiera del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (EFSF, por sus siglas en inglés) para la recapitalización del sector bancario español. Nosotros, y las autoridades españolas, estamos totalmente centrados en la aplicación de ese programa sectorial", ha declarado O'Connor a Efe.
Según el portavoz, "no hay negociaciones en curso sobre ningún otro tipo de programa para España [...] No se ha recibido ninguna petición de España para ningún otro tipo de asistencia financiera y no esperamos una solicitud de ese tipo a corto plazo", ha insistido.
Sin embargo, el presidente del Gobierno , Mariano Rajoy, no ha descaratado que el país pudiera solicitar ayuda a Europa para rebajar sus costes de financiación, aunque la decisión se tomará una vez que el BCE aclare las medidas que prepara para aliviar las tensiones de la deuda española.
El presidente del BCE, Mario Draghi, anunció a principios de agosto que la entidad estaba abierta a comprar deuda soberana en el mercado secundario para apoyar a los países en más apuros, siempre que éstos solicitaran previamente el rescate soberano de forma oficial. Asimismo, el miembro alemán en el comité ejecutivo del BCE, Jörg Asmussen, insistió esta semana en que "un estado debe presentar una solicitud de ayuda y cumplir numerosas condiciones político-económicas" antes de que los fondos de rescate europeos puedan actuar comprando deuda pública y el BCE haga lo propio en el mercado secundario.
El próximo 6 de septiembre tendrá lugar la primera reunión del BCE tras las vacaciones de verano, en donde podría dar más detalles sobre sus intenciones.