International Airlines Group (IAG), sociedad resultante de la fusión entre Iberia y British Airways (BA), perdió 251 millones de euros en el primer semestre de 2012, tras ganar 88 millones de euros en el mismo periodo de 2011, por el encarecimiento del combustible y las pérdidas de Iberia.
En un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), IAG empeora sus perspectivas de negocio para 2012, ya que afirma que, "habida cuenta del reciente empeoramiento del entorno económico español", prevén registrar una ligera pérdida operativa para el conjunto del año.
El objetivo del grupo para este año era lograr un resultado operativo equilibrado, después de considerar el impacto de los costes de reestructuración de bmi y el impacto negativo, a corto plazo, de su adquisición. "Sigue habiendo una gran diferencia en los resultados de nuestras filiales. British Airways obtuvo un beneficio de las operaciones a pesar del incremento de los precios del combustible, mientras que las pérdidas de Iberia se acentuaron", señala el consejero delegado de IAG, Willie Walsh, en el comunicado.
Los resultados
IAG destaca que mientras BA obtuvo un beneficio de las operaciones, después de partidas extraordinarias, de 13 millones de euros hasta junio, Iberia registró una pérdida de las operaciones de 263 millones de euros.
Los costes de combustible aumentaron un 25 % hasta alcanzar los 2.973 millones de euros.
Durante el primer semestre, los ingresos aumentaron un 9,8 % alcanzando los 5.812 millones de euros, incluidos 198 millones de euros derivados del impacto desfavorable de la conversión de la moneda.
Los ingresos unitarios de pasaje registrados en el semestre aumentaron un 8,9 %, con un incremento de capacidad del 2,6 %.
Los costes unitarios excluidos el combustible aumentaron un 6,7 %, o un 3 % a tipos de cambio constante.
La deuda neta del grupo aumentó en 160 millones de euros hasta alcanzar los 1.308 millones de euros.