"Que se ausenten de la reunión es lo de menos. El cumplimiento de la Ley de Estabilidad Presupuestaria está por encima del resultado del CPFF. Y la ley está para cumplirse, vengan o no vengan". Con estas palabras ha despachado Cristóbal Montoro el plante que Andalucía y Cataluña han realizado este martes en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF). El ministro de Hacienda ha sido claro: "No estoy preocupado por ese tipo de poses políticas". Lo importantes es que el objetivo de déficit sigue siendo del 1,5% y lo demás no importa.
De esta manera, Montoro ha desactivado el intento de Cataluña y Andalucía de paralizar el CPFF. De hecho el ministro no ha querido entrar en polémicas e incluso ha asegurado que "respeta" esas "poses" pero que lo único que vale son los objetivos de déficit trazados que "se van a cumplir todos".
En este sentido, el intento de rebelión de las comunidades socialistas podríamos decir que ha quedado en nada. Asturias y Canarias, con Cataluña y Andalucía ausentes, han votado en contra de los objetivos de déficit y de endeudamiento que Montoro ha presentado en el CPFF. El resto de comunidades, todas ellas del PP, han dado su voto favorable a la propuesta del Gobierno.
Tras esta votación, en 2013 las comunidades autónomas no podrán superar un déficit del 0,7% del PIB, mientras que en el año 2014 deberán tener un déficit como máximo del 0,1% y en 2015 un superávit del 0,2%. Hay que recordar que Asturias es la única región del régimen general (Navarra y País Vasco tiene su propio concierto económico) gobernada por el PSOE junto con Andalucía. En Canarias, el presidente es Paulino Rivero, de Coalición Canaria, gracias a un pacto con los socialistas.
La polémica de la deuda
En cuanto al endeudamiento, se establece un objetivo de deuda sobre el PIB nacional para el conjunto de las comunidades autónomas del 15,1% en 2012 y del 16% en 2013.
Este nuevo objetivo de deuda es el clavo ardiendo al que se ha agarrado Andalucía para justificar su rechazo al plan de Montoro. A finales de 2011, la deuda de esta comunidad era del 10,6% del PIB, uno de los niveles más bajos entre las 17 regiones. Mientras, Cataluña o Valencia superan el 20%. Lo que reclama la comunidad de Griñán es que todas las regiones tengan el mismo techo de deuda. Como ha explicado Montoro, eso no tendría mucho sentido, porque el punto de partida es muy diferente. Obligar a todas las comunidades a tener la misma deuda a final de año obligaría a Cataluña o Valencia a un ajuste de 7 u 8 puntos del PIB en un sólo ejercicio.
Las regiones tendrán que ir igualando su deuda, pero con algo más de margen. Tal y como ha puesto de manifiesto Marta Fernández Currás, en 2020 todas tendrán que cumplir con el mismo objetivo. En ese año, según lo pactado con Bruselas, España (Gobierno central, CCAA y Ayuntamientos) no podrá superar el 60% de deuda respecto al PIB. Y todas las regiones tendrán que cumplir con su parte.
Por otro lado, no tendría ningún sentido subir el techo de deuda sin subir el de déficit o el límite de gasto. Es decir, si Andalucía tenía una deuda del 10,6% y tiene un déficit permitido del 1,5% para este año, su límite de deuda está implícito en ambas cifras y en los planes de gasto presentados al Gobierno. Sólo hay una explicación y es que la Junta esté pensando es en meter partidas de gasto no incluidas en su Plan Económico Financiero y financiarlas a través de emisiones de deuda extraordinaria. En teoría, daría igual que le dejaran un límite de deuda teórico del 25%, porque el déficit y el gasto limitarían su capacidad de maniobra.
Los plantes
Todas las preguntas de la rueda de prensa posterior al CPFF han girado en torno a los plantes. Por un lado, al Consejo no ha asistido el consejero de Economía de Cataluña, Andreu Mas-Colell, al entender que se quieren imponer a las autonomías las decisiones sin diálogo. Por otro lado, la consejera de Andalucía, Carmen Martínez Aguayo, ha abandonado la cita entre el ministro y las comunidades después de casi una hora. Y, por último, Canarias y Asturias han votado en contra. Hay que recordar que en la anterior reunión del Consejo, hace quince días, Andalucía, Cataluña, Canarias y Asturias se mostraron contrarias a estos objetivos, mientras que Extremadura y Castilla y León, gobernadas por el PP, se abstuvieron, voto que esta vez ha sido afirmativo.
Montoro no se ha mostrado muy preocupado por estos movimientos y ha recordado que "una mayoría aplastante de CCAA se ha pronunciado a favor de los objetivos propuestos por el Gobierno. El compromiso lo tenemos que cumplir todos, también los que se han ausentado".
En su opinión, el problema es que "hay determinados gobiernos que prefieren ausentarse y explicar a su opinión pública que los problemas vienen del Gobierno de España", algo que ha negado. "No hay nada que hacer de manera especial con Andalucía y Cataluña, sólo tienen que cumplir la Ley de Estabilidad, como todos", ha explicado, "que se ausenten de la reunión es lo de menos. El cumplimiento de esa ley está por encima del resultado del CPFF. La ley está para cumplirse, vengan o no vengan".
Preguntado por los periodistas sobre si le preocupa que las regiones díscolas puedan ignorar los llamados de Hacienda, Montoro ha asegurado que no está "en absoluto preocupado. Hay que distinguir lo que son este tipo de poses políticas. Eso vale lo que vale, pero lo único que aquí cuenta es que tenemos los objetivos de déficit trazados y se van a cumplir todos".