Alemanes, cabezas cuadradas. Nunca pudo tener el dicho tanta razón. Pero que no le ande la señora Merkel apretando tanto el cinturón a los países con más problemas económicos de la zona euro porque le puede pillar el efecto boomerang y que no pueda vender nada en el exterior, lo que supondría un grave problema para el comercio y la economia alemana también.
Sí sería, un problema (el no poderles vender nada a los de la periferia del euro), pero no creo que la solución sea darles primero el dinero para que luego compren los productos alemanes. El pagador de impuestos alemán imagino que pensará que para semejante disparate, mejor que su gobierno les dé a ellos el dinero. Evidentemente, una economía no puede funcionar así. Eso lo entiende cualquiera por lerdo que sea. Pues lo mismo es aplicable al regalarle el dinero a España o Grecia para que sigan comprando productos "made in Germany".