Por cierto: esto es una razón más para desconfiar SIEMPRE de los gobiernos. Siempre existen agendas ocultas.
Por tanto, a los gobiernos, como a los jóvenes: cortos de dinero.
Hay que recuperar libertad. Y para eso tenemos que arrebartarle al estado una gran parte del poder que detenta.
Curiosa interpretación de la "lealtad". Si un "servidor público" debe postponer su lealtad a la institución a la que sirve (que incluye la confidencialidad), a la lealtad "debida" a su líder de partido... es que este Rajoy es mucho peor de lo que demuestran las pésimas decisiones de su gobierno.
La palabra "lealtad", tan hermosa como olvidada, se utiliza aquí impropiamente. Más bien se refiere a vasallaje, o algo más peyorativo. No creo que Rajoy entienda su significado, la verdad.