El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ha pedido este miércoles a Grecia que cumpla el plan de ajuste acordado con la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI) a cambio del segundo rescate de 130.000 millones de euros y ha avisado a las fuerzas políticas helenas de que "la alternativa es mucho peor".
"Hay un acuerdo entre Grecia y la eurozona", ha subrayado Barroso en un debate organizado por la cadena alemana WDR en la Eurocámara. "Grecia tiene que respetar este acuerdo al igual que el resto de Estados miembros. Es una cuestión de credibilidad", ha señalado.
"Si este acuerdo no se respeta sería muy negativo para Grecia", ha avisado el presidente del Ejecutivo comunitario. "Algunas reformas son dolorosas y llevan tiempo y hay que hacer algunos sacrificios. Pero la alternativa es mucho peor para los ciudadanos griegos, especialmente para los más vulnerables", ha insistido.
Barroso ha eludido comentar el resultado de las elecciones generales del pasado fin de semana, que dejaron en minoría a los partidos políticos que apoyan el rescate de la UE. Pero ha dejado claro que "hay que respetar la democracia en Grecia, pero también en los otros 16 países de la eurozona, que han suscrito un compromiso y no están dispuestos ahora a cambiarlo".
Por su parte, el presidente de la Eurocámara, el socialista alemán Martin Schulz, ha destacado que la ayuda de 130.000 millones de euros que proporciona la UE exige que Grecia siga con las reformas estructurales.
"Tenemos que admitir que en las elecciones se expresó la voluntad popular y que no se ajusta a nuestros planes", ha señalado Schulz. Pero se ha mostrado convencido de que será posible convencer a parte del 40% de la población que no votó si la UE envía un "mensaje de esperanza" a Atenas que incluya no sólo ajustes sino también inversiones con ayudas europeas a corto plazo.