España está sondeando a bancos de inversión, como Credit Suisse, Goldman Sachs y UBS en su búsqueda de una solución contundente para el sector financiero, afectado por el desplome de los precios inmobiliarios que amenaza con poner en cuestión la solvencia del país, según Reuters.
El Gobierno ha dicho repetidamente que no pedirá dinero a la Unión Europea o al Fondo Monetario Internacional para solucionar el problema de sus bancos, afectados por miles de millones de euros en pérdidas tras el pinchazo de la burbuja inmobiliaria en 2008. En su lugar, el banco central está sondeando la transferencia de los activos tóxicos inmobiliarios del conjunto de la banca a una sociedad holding para que valore e intente vender estos activos.
Los banqueros consultados dicen que entre las instituciones que se han presentado para asesorar a España están aquellas que han acumulado experiencia con la creación de la Agencia Nacional de Gestión de Activos (NAMA, por su sigla en inglés) en Irlanda un modelo que España podría utilizar - o con la reestructuración de la deuda de Grecia de este año.
Lazard, Blackstone y BNP Paribas asesoraron sobre la reestructuración de la deuda griega. Goldman Sachs y Bank of America estuvieron entre los principales asesores para Irlanda. Credit Suisse, UBS, Citigroup, JP Morgan, Rothschild, Nomura y Deutsche Bank también han participado en trabajos con gobiernos a lo largo de la crisis financiera, según datos de Thomson Reuters.
"El gobierno está estudiando ideas y lo hace a instancias del Fondo Monetario Internacional", dijo Pierre-Yves Bonnet, jefe global de instituciones financieras de Société Générale.
"Pero es una decisión con mucha transcendencia política, porque significa reconocer que inicialmente habían subestimado el volumen de las provisiones necesarias".
El gobierno español pidió este año a los bancos nacionales un esfuerzo adicional de saneamiento por 54.000 millones de euros. Desde junio de 2008, y sin tener en cuenta las nuevas medidas que ha puesto en marcha el Gobierno en relación a los activos relacionados con el sector, los bancos ya provisionaron 112.000 millones de euros por el deterioro de sus activos, según datos recientes del Banco de España.
Además, el Estado inyectó 18.000 millones de euros en el sistema, tomó el control de varios bancos y forzó a las entidades a reconocer pérdidas. Ahora está buscando lo que se denomina una "estructura de liquidación" para liberar a los bancos de los activos tóxicos remanentes.
Algunos analistas esperan que los precios inmobiliarios bajen otro 20 o 30%, dejando insuficiente el colchón de reservas constituido por el sector financiero y aumentado la amenaza de un eventual rescate para España, siguiendo la estela de Grecia, Portugal e Irlanda.
Antes de crear la sociedad holding, los asesores inmobiliarios tendrían que determinar el volumen necesario de provisiones para hacer frente a la avalancha de activos tóxicos. Elegir a un asesor bancario para que ayude a crear y poner en marcha el banco malo sería un paso posterior en este proceso, dijeron banqueros.
Peter Hahn, que enseña finanzas en la escuela de negocios Cass de Londres y fue director general de Citigroup, dijo que los bancos de inversión podrían dar una valiosa aportación a la hora de dar salida a los activos.
"La valoración de un consultor inmobiliario no vale nada a menos que puedas encontrar un comprador para esos activos. Ahí es donde entran los bancos de inversión", dijo.