Parece que Luis de Guindos se ha convertido en el encargado de que fuera de nuestras fronteras se conozca muy de cerca y al minuto el proceso de reformas así como la situación financiera y política que atraviesa España. Así, el ministro de Economía concedió ayer una entrevista a The Wall Street Journal en la que no ahorró dramatismo en sus explicaciones.
"No tenemos margen de error. Nos encontramos en una situación, desde el punto de vista presupuestario, de perder o perder". Explicaba que "si uno no hace los ajustes suficientes los mercados le penalizan. Pero si vas demasiado lejos los mercados también pueden sancionarte", en referencia al crecimiento económico.
Según las previsiones "prudentes y conservadoras" que de De Guindos trasladó a Wall Street Journal, la economía local española se contraerá un 1,7% este año, aunque advierte que para el próximo habrá "un crecimiento ligeramente positivo". En cualquier caso, De Guindos alejó los temores intervencionistas sobre las regiones más poderosas de España y señaló que la Ley de Equilibrio Presupuestario otorga al Gobierno central nuevos poderes para controlar las finanzas regionales.
Por otro lado, este diario recuerda las palabras de Elena Valenciano que apuntaba que "el coste de la vida es más alto, el empleo más precario, los despidos más baratos y los impuestos más altos."
Los presupuestos se debatirán ahora en el Parlamento de España en medio de un creciente descontento público por la enorme magnitud de los recortes en un país ya en recesión económica. El desempleo, que supera el 20%, se ha cebado en los jóvenes, donde la tasa supera el 50%. Además, WSJ recuerda que el gobierno sufrió una huelga general por sus reformas laborales.
En cualquier caso el ministro señaló que aproximadamente la mitad de las medidas presupuestarias de 2012 ya están en vigor y los nuevos impuestos presentados el viernes se pondrán en marcha inmediatamente. Sólo los nuevos recortes en el gasto deben ser aprobada por el Parlamento, probablemente a mediados de mayo.
Además, señala que España se ha embarcado en una reforma económica "difícil", pero que debería devolver al país a la senda del crecimiento en 2013. Por otro lado pronostica que la deuda pública de España se incremente en alrededor de diez puntos porcentuales este año respecto a su nivel actual del 68,5 % del producto interior bruto (PIB), dijo De Guindos en la entrevista.
El aumento de la deuda del sector público este año se debe en parte, según De Guindos, a la necesidad de financiar el déficit y al apoyo del Ejecutivo mediante garantías de un préstamo sindicado a los gobiernos locales, que deben cerca de 35.000 millones de euros a proveedores.
De Guindos explicó que España ha atraído la atención mundial debido a los temores de que el Gobierno tuviera que imponer drásticos recortes presupuestarios en medio de una contracción económica sin precedentes y una tasa de desempleo récord. Los ajustes fiscales, "aunque son una condición necesaria", no generarán crecimiento por si solos, dijo De Guindos. "Es una situación muy complicada, dado que el Gobierno también tiene que fomentar el crecimiento", agregó.
El Ejecutivo prevé que el ajuste fiscal provocará una contracción de la economía de un 1,7 % este año, una previsión que De Guindos califica de "prudente y conservadora". Pero el año próximo debería haber un "crecimiento ligeramente positivo", concluyó De Guindos.