El PSOE ha presentado dos proposiciones no de ley (PNL) en el Congreso de los Diputados proponiendo al Gobierno la recaudación de 10.000 millones de euros mediante la creación de un nuevo impuesto de grandes fortunas y una reestructuración del Impuesto de Sociedades, según ha explicado la portavoz parlamentaria, Soraya Rodríguez, en rueda de prensa tras la Junta de Portavoces.
Según los socialistas, la instauración de un nuevo gravamen para las grandes fortunas, que se aplicaría a "bienes suntuarios, exceptuando los patrimonios medios y la vivienda habitual", permitiría recaudar 3.000 millones de euros. La mitad de esa cantidad se destinaría a las comunidades autónomas y, el 75% de dicha aportación, debería tener "carácter finalista para sanidad, educación y servicios públicos esenciales".
Por su parte, la actualización del Impuesto de Sociedades –que ha pasado de recaudar 44.823 millones en 2007 a 16.198 millones en 2010 por la crisis económica, particularmente por la caída de recaudación en el sector inmobiliario– permitiría ingresar en las arcas públicas 7.000 millones adicionales.
Según los socialistas, habría que "garantizar que se pueda implantar un mínimo fiscal para que todas las sociedades paguen tipos similares y reestructurar las deducciones, que hacen que haya un trato muy diferenciado entre pymes, que pueden acogerse a menos deducciones, y grandes empresas, generando fuerte desigualdad".
Con estas dos medidas se conseguirían 10.000 millones de euros más que servirían para cubrir el "agujero" detectado por el PSOE en las cuentas del Ejecutivo central sin tener que subir impuestos de forma generalizada y recurriendo a una vía diferente de los recortes de servicios públicos o de los copagos.