Ya va cuadrando todo. Tu me haces una reforma laboral para despedir gente barato y yo te doy un crédito para salir del lio en que habéis metido a las administraciones. Eso sí, el dinero del crédito que me lo deje el Banco Central Europeo al 1% y a tí te lo présto al 3,5%. Entre lo que voy a ganar con el crédito, lo que ahorraré con toda la gente que voy a despedir de las cajas que me vas a regalar por dos duros y los nuevos contratos que haré con 15 horas de trabajo y 600 euros de sueldo, ¡¡nos vamos a forrar!!. Además luego les subimos un poco los impuestos y el crédito nos lo devuelven los ""currelas" de los 600 euros. HIJOS DE P...
¿Y si un Ayuntamiento o una Autonomía se acoge a estos préstamos a 10 años y luego no utiliza el dinero para pagar deudas atrasadas?. ¿Acaso a ley actual va a permitir ir contra el Alcalde de ese Ayuntamiento o contra el Presidente de esa Autonomía? ¿No será mejor que sea Hacienda quien pague esas facturas y más tarde se las cobre a cada Autonomía, en cantidades anuales restándolas de los fondos que le correspondan y que, a su vez, cada Automía haga igual con sus Ayuntamientos morosos?.
¿Qué pasaría si la institución que se acoge a estos préstamos, además de lo anterior, se niega a devolverlo al Estado?. Seguramente, el Estado utilizaría a Hacienda para recuperarlo en basae a descontarlo de los dineros a transferir a esa institución. Pues que se cure en salud y lo haga como procedimiento general con independencia del sigo político que gobierne en esas instituciones que se acojan a estos préstamos.
Téngase en cuenta que la golfería es de nivel máximo entre los que estamos pensando. Adminístrese con eficacia el dinero de nuestros impuestos, y que no parezca que siguen gobernando los del PSOE. Bocona
¿Y no sería mejor que, en lugar de que esos dineros fueran a parar a las CCAA y Minicipios para pagar facturas atrasadas de proveedores, se encargara el propio gobierno, utilizando a los miles de funcionarios de los que dispone, de pagar dichas facturas?. Es la única forma de que no se queden por el camino la mitad de los dineros y la mitad de las facturas pendientes sin pagar. Están tan hechos a robar, que el pagar les ofende.