La Fundación de Cajas de Ahorros (Funcas) ha empeorado más de un punto su previsión para el año 2012 y vaticina ahora una caída del PIB del 1,7% frente a la del 0,5% estimada anteriormente, mientras que aventura que la tasa de desempleo se mantendrá por encima del 24% hasta el año 2014.
Las nuevas previsiones se han realizado teniendo en cuenta las últimas medidas tomadas por el Gobierno y medidas adicionales a adoptar por el conjunto de las administraciones públicas por valor de 26.000 millones de euros para cumplir con las exigencias de Bruselas en materia de consolidación fiscal.
En cualquier caso, el empeoramiento de las previsiones no es solo consecuencia del mayor ajuste fiscal requerido, ya que Funcas estima que los mayores ratios de capital exigidos por la Autoridad Bancaria Europea y las "severas exigencias" de provisiones de la reforma del Gobierno provocarán un endurecimiento adicional en las condiciones financieras en un primer momento, aunque serán positivas a medio plazo. Además, el debilitamiento de la coyuntura europea actuará de freno sobre las exportaciones, el único motor de la "tímida" recuperación en 2010 y principios de 2011, mientras que la caída del empleo ha sido "más intensa de lo esperado" y provocará un mayor efecto contractivo sobre el consumo.
Además, el hundimiento de todos los componentes de la demanda nacional en el cuarto trimestre situará a esta variable en un punto de partida "muy bajo" que condiciona negativamente su media para el conjunto de 2012.
Todos estos factores, según Funcas, actuarán con "especial fuerza" durante los dos o tres primeros trimestres del año, para los que se prevén caídas superiores a la del último trimestre de 2011 (-0,3%). En la recta final de 2012 podrían aflorar algunos de los efectos positivos asociados al saneamiento fiscal o las reformas laboral y financiera produciendo un "freno" a la caída del PIB. Así, la economía podría recobrar tasas de crecimiento trimestrales positivas, aunque "moderadas", a partir del primer trimestre de 2013, que permitirán "un modesto" crecimiento en el conjunto del año del 0,2%.
El empleo caerá un 3,4% en 2012 y un 0,8% en 2013
En este contexto, el empleo caerá un 3,4% en 2012 y un 0,8% en 2013, lo que elevará el paro al 24,2% y 24,5%, respectivamente, ya que el empleo no se estabilizará hasta la segunda mitad de 2013. La productividad, por su parte, seguirá creciendo, pero a un ritmo más reducido (1,8% en 2012 y 1% en 2013).
Además, Funcas espera descensos de las remuneraciones salariales por el previsible impacto de la reforma laboral, lo que hará que el coste laboral unitario siga recortándose "intensamente" en 2012 y 2013 y permitirá recuperar competitividad frente al exterior.
Por elementos, el consumo de los hogares caerá un 1,9% en 2012 y un 0,4% en 2013, mientras que todos los componentes de la formación bruta de capital fijo intensificarán su caída. En concreto, la inversión en construcción descenderá un 8,6% y en bienes de equipo caerá un 5,6% en 2012 y un 0,3% en 2013. El deterioro de las condiciones económicas internacionales, especialmente en Europa, dará lugar a una moderación del crecimiento de las exportaciones de bienes y servicios en 2012, hasta el 2,4%, aunque acelerará el ritmo en 2013 (+5,7%). Las importaciones, por su parte, caerán un 4,2% este año y presentarán un "leve crecimiento" en 2013.
Déficit del 5,8%
Con todo, en 2012, la demanda nacional será inferior al PIB por primera vez en quince años, de modo que el saldo de bienes y servicios de la balanza de pagos será positivo. No obstante, el saldo de las balanzas por cuenta corriente y de capital seguirá siendo negativo en 2012 (-1,9%), aunque alcanzará el equilibrio en 2013.
En este contexto, y a pesar de la subida de impuestos y del recorte de gasto, el déficit público se situará en el 5,8%, "significativamente alejado" del objetivo del 4,4% que exige Bruselas, por la caída de los ingresos fiscales como consecuencia de la contracción económica y el mayor aumento del gasto en prestaciones por desempleo. Así, Funcas asegura que para reducir el déficit al 4,4% habrá que tomar medidas fiscales y/o presupuestarias adicionales a las contempladas, lo que a su vez se traduciría en una caída más intensa del PIB.
"Grado elevado de incertidumbre"
En cualquier caso, la fundación alerta de que sus nuevas previsiones están sujetas a un "grado elevado de incertidumbre" porque no se pueden descartar nuevos episodios de turbulencias en los mercados aunque haya elementos "importantes" para recobrar la confianza y la estabilidad. Además, asegura que el conflicto con Irán puede desembocar en una agudización de las tensiones sobre el precio del crudo y recuerda que se desconoce la política fiscal del Gobierno, así como las reformas y medidas que irá llevando a cabo a lo largo del año y sus efectos sobre el comportamiento de la economía.