Mientras los líderes sindicales amenazaban ayer en público con una "escalada" de movilizaciones, en privado llevan ya tiempo preparando estas protestas contra el Gobierno del Partido Popular.
Una carta interna de UGT en Castilla-La Mancha, recogida por La Razón, muestra el modus operandi de la central sindical a la hora de llevar a cabo sus protestas. La carta, fechada en Toledo el pasado 16 de febrero, asegura que "es el momento de que consideremos entre todos liderar acciones contundentes".
Sin embargo, desde UGT quieren hacer todas estas "acciones contundentes" en secreto y hablan de organizarlas "siempre desde la más absoluta discreción". Así, jalean a sus afiliados a apoyar acampadas, encierros, manifestaciones y paros. Pero en esta carta se pide confidencialidad total "hasta que no se haya efectuado el encierro".
¿Cómo evitar que se entere el Gobierno de Castilla-La Mancha? Así lo explica UGT: "Para ello la comunicación con los/as delegados/as se debe hacer vía telefónica, y advirtiéndoles de la confidencialidad de la medida hasta que no se haya efectuado el encierro". El objetivo final es conseguir una acción conjunta a nivel regional por lo que piden "conocer hasta dónde están dispuestos a llegar" los trabajadores.
La carta está firmada por la secretaria general de la Federación de Servicios Públicos de UGT de Castilla-La Mancha, Mari Carmen Campoy Herrera. Según el diario de Planeta, la líder sindical pretendería con esta misiva interna organizar las acciones para coger por sorpresa a los dirigentes políticos.