El Tesoro Público ha colocado hoy 4.000 millones de euros en bonos a diez años a través de una emisión sindicada en la que los bancos colocan directamente la deuda entre los inversores, y en la que se ha ofrecido una rentabilidad anual del 5,4%.
Fuentes del Ministerio de Economía han dicho a EFE que la deuda se ha colocado al reabrir una antigua emisión en circulación, que ahora suma ya 11.340 millones de euros. Uno de los bancos colocadores ha explicado que la intención era emitir entre 3.000 y 4.000 millones de euros, pero gracias a que la demanda de los inversores duplicó la oferta, se colocó el máximo previsto.
La emisión de la deuda, que vence en enero de 2022, ha servido también para proporcionar mayor estabilidad al mercado secundario.
Al hacerse a través de una operación sindicada, los bancos colocadores (Barclays, BBVA, Deutsche Bank, Goldman Sachs, Santander y Société Générale) han adjudicado directamente los títulos entre sus inversores, evitando que sea el Tesoro el que reciba las peticiones, como suele suceder. Horas antes del cierre de la emisión, el secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez-Latorre, había señalado que la colocación iba "bien".
Tras comenzar la sesión con una rentabilidad del 5,07 %, el bono español a diez años repuntaba después del mediodía hasta el 5,24 %, si bien terminó la jornada en el 5,22 %. De este modo, la prima de riesgo española -que mide el diferencial entre la rentabilidad del bono alemán a diez años y su equivalente nacional- subió hasta 324 puntos básicos, catorce más que al cierre de ayer.