BBVA obtuvo un beneficio atribuido de 3.004 millones de euros, lo que supone un descenso del 34,8% respecto al ejercicio anterior, tras realizar un ajuste contable de 1.011 millones de euros netos de impuestos en el fondo de comercio de la franquicia de Estados Unidos.
Excluido este cargo, el beneficio atribuido recurrente se situó en 4.015 millones de euros, un 12,8% menos que en 2010, ha informado este jueves la entidad, que ha afirmado que el deterioro del fondo de comercio es un registro contable que no afecta a la liquidez ni a la solvencia del grupo.
El presidente del BBVA, Francisco González, ha destacado que "un año más, los resultados demuestran la extraordinaria capacidad de BBVA para generar beneficios incluso en los escenarios más complejos". "Hemos fortalecido nuestra capacidad de crecimiento durante la crisis", ha resaltado.
"BBVA está fuerte, genera empleo, mantiene una política de riesgos pegada al terreno y sigue invirtiendo en tecnología, procesos y personas, para situarse a la cabeza de la banca mundial del siglo XXI", ha subrayado González.
La entidad ha asegurado además que cumplirá "con holgura" con las recomendaciones la Autoridad bancaria Europea (EBA) sin vender activos estratégicos. A 31 de diciembre del pasado año, BBVA alcanza ya gran parte de la recomendación y cubrirá el importe restante con la generación orgánica durante el primer semestre de este año. Así, la ratio de core capital se eleva hasta el 10,3% en diciembre bajo la normativa actual, tras incrementar su capital de máxima calidad en 5.300 millones de euros sólo en el cuarto trimestre.
Por su parte, la tasa de mora se situó en diciembre en el 4% desde el 4,1% registrado en septiembre y un año antes, con una cobertura del 61%. El banco ha subrayado en este sentido que su estrategia "prudente y anticipatoria" mantiene estables los indicadores de riesgo por octavo trimestre consecutivo.
Mayores provisiones
Las pérdidas por deterioro de activos financieros se situaron en 2011 en 4.226 millones de euros, lo que significa una reducción del 10,4% frente a las del año anterior. En el cuarto trimestre, la entidad aumentó el nivel de provisiones aprovechando los ingresos más elevados de los últimos tres meses del ejercicio. En concreto, las dotaciones a provisiones de la entidad alcanzaron los 510 millones de euros en 2011, un 5,7% más.
Por tercer año consecutivo, los ingresos de BBVA superan los 20.000 millones de euros. El margen de intereses se situó en 13.160 millones de euros, un 1,2% menos, mientras que el margen bruto alcanzó los 20.566 millones de euros, un 1,6% menos, y el neto se situó en 10.615 millones de euros, un 11,1% inferior al de un año antes.
En cuanto a la actividad, el crédito bruto a la clientela del grupo creció un 3,7%, hasta 361.310 millones de euros, al tiempo que los recursos de clientes en balance ascendieron a 282.173 millones de euros, un 2,3% más. En España, BBVA logró un beneficio trimestral de 202 millones de euros y un importe acumulado de 1.363 millones de euros, un 39,5% inferior. La calidad crediticia, la mora (4,8%) y la cobertura (44%) permanecieron estables por octavo trimestre consecutivo.
"En un escenario de reestructuración del sector, BBVA se encuentra en mejor situación para afrontar las nuevas exigencias regulatorias en el ámbito promotor. Su exposición relativa a activos inmobiliarios en dificultad es notablemente menor que la del sistema en su conjunto", ha subrayado.
A pesar del contexto económico complejo, BBVA ha aumentado su plantilla un 3,4%, hasta 110.645 personas en 2011, con una creación neta de 518 puestos en España. Así, BBVA finaliza el año con casi un millón de accionistas, 7.457 oficinas y 18.794 cajeros.