La entradilla de la noticia resalta la afirmación del Sr. Ministro de que España necesita implementar un marco laboral "completamente nuevo" y adecuado para pymes. Pero creo que es la completa pérdida del Norte que sufre esta sociedad anestesiada, que hace tiempo delegó la capacidad de pensar en los flautistas que nos conducen al precipicio, la que hace que semejantes aberraciones nos lleguen a parecer naturales y deseables.
Para empezar, recordar cómo la "verdad" del Siglo funciona a base de muletillas y consignas y que en esta época de tribulaciones han aparecido otras nuevas. Así que las de moda son "creación de empleo"; emprendedores" y "PYMES" -entre otras-. Pero lo que España necesita no es un marco laboral adecuado a las Pymes, sino a los seres humanos.
Creo que estos cretinos que nos gobiernan no se enterarán nunca de que lo que necesita este y cualquier otro país, es una Justicia independiente de la política; con unas reglas de juego claras que no cambien con cada nueva salida del Sol, y lo que es más importante, que el único marco debe ser el que los individuos quieran acordar entre sí en ejercicio de su libertad. Siempre naturalmente, que estos acuerdos no resulten claramente lesivos para la libertad o el patrimonio de terceros.
Cual de ellos, le va hacer a Carmen VELA?
A mi este tío hasta que no eche a la Vela esa, me cae como una patada en los mismísimos....
Cuando los tiempos eran buenos, y las empresas ganaron verdaderas millonadas, nadie se acordó de hacer partícipes a los trabajadores de esos beneficios. Ahora, que corren malos tiempos, todo el mundo quiere "cortarles el cuello", vía recortes de salarios y eliminación de derechos laborales, para que no coman. Señores del PP, que no se han enterado ustedes de que les hemos votado para que acaben con la corrupción y el despilfarro disparatado que va ligado a ella. De esa manera podrán eliminar entre un 30 a 40 por ciento de los presupuestos, autonómicos y locales, lo que conllevará, bien una tremenda bajada de impuestos, o bien un tremendo incremento de servicios públicos y prestaciones sociales, y todo ello daría como resultado la consiguiente disminución de la presión de los trabajadores en sus exigencias salariales hacia las empresas. Dentro de la Unión Europea existen numerosos paises donde, con una presión fiscal bastante menor que la española, todas las familias tienen una ayuda, directas o vía deducciones, por ejemplo por hijos, que suben tanto o más que el propio sueldo. Aquí en España, ese dinero y más porque nuestra presión fiscal ya es la primera de Europa a la altura de Suecia, va a parar a la corrupción despilfarradora de la "casta política privilegiada" y a llenar el bolsillo de las grandes fortunas, que cada vez son mayores, y que todavía lo serán más con la reforma qyue el PP le va a hacer a "su medida"..
¿Tiene De Guindos bien hecho el diagnóstico?. Además de controlar el déficit público propone "reformas estructurales", entre las que destacan la laboral y la del sector financiero. Pero es grave que no diga nada del tradicional desequibrio exterior de España, causa remota de nuestros males actuales, especialmente después de la REVALUACION de la peseta que “de facto” supuso la negociación de 1985 para acceder a las Comunidades Europeas, y el pernicioso acceso al EURO con una moneda todavía sobrevaluada. Ver “ESPAÑA, una economía asfixiada” http://www.lebrelblanco.com/articulos-prensa/
[sigue] Dejen pues señores políticos de interferir en las relaciones humanas, porque ustedes no son más sabios que el resto sino los más tontos -opino yo-; que ya decía nuestro sabio refranero que más sabe el loco en su casa que el cuerdo en la ajena.
Desgraciadamente, frente a una propuesta tan lógico y sencilla como permitir que los ciudadanos puedan llegar a los acuerdos que les parezcan más adecuados a sus intereses, los salvapatrias -en realidad, busca ruínas- de turno, argumentan que es necesaria una legislación que salvaguarde los intereses del débil frente al fuerte. Se consigue así toda una legión de ciudadanos perfectamente protegidos de la rapiña, que no tienen un mendrugo que llevarse a la boca y que tienen que vivir de la caridad pública.
Habría que recordar a esos "economistas sociales", que el mundo moderno y el beneficio de las grandes empresas tienen su fundamento en que exista el mayor número posible de esos "esclavos" que ellos quieren evitar, con el mejor poder adquisitivo posible.
No es este el sitio ni dispongo de espacio para una disertación sobre economía política. Así que solo recordar que incluso aunque fuera cierta esa necesidad de proteger al débil del fuerte, mejor no se metan en el asunto; permitan pues que las hormigas ordeñen libremente a los pulgones. Porque está demostrado que en su propio interés, los cuidan amorosamente. Además, y como último recurso, siempre podrán ejercer esa justicia distributiva que pretenden a través de los impuestos.
Salu2.