Suscribo este artículo de la a a la z.
Intuía que mentían y no voté al PP, don Emilio. Lamento haber acertado.
Aclarémonos de una vez. España es Extremadura, gobernada por un partido que dice cosas «de derechas» y hace lo que dice Izquierda Unida. ¿Por qué? Para mantener la «paz social».
¡Maricomplejines ataca de nuevo!
Si Zapatero se presenta al Congreso del PSOE, es capaz de ganarlo.
Totalmente de acuerdo con el Sr. Campmany. El PP me ha decepcionado profundamente, me ha recordado lo de Hayek y los socialistas de TODOS los partidos. Así no saldremos nunca, son politiquillos cobardes, ni con mayoría absoluta, ni con nada, ellos siempre a lo más fácil, aunque sea lo que más problemas no creará a medio y largo plazo.
Abajo Partitocracia!
El poder del Pueblo se desarrolla mediante partidos transparentes, que jueguen limpio, y que no necesiten nada más que de su buena gestión para gobernar quieta y pacíficamente a los ciudadanos, que para ello los ponen. Jugar a demócratas, cuando lo que se intenta es imponer una dictadura más o menos larvada, pero no menos real, no es lo que quieren los ciudadanos.
Derrochar los haberes de toda la nación, jugar a los separatismos que siempre engendran más guerra y más odios, azuzar los sentimientos más primitivos de las personas, sobre todo de las menos favorecidas culturalmente, y ofender la cultura y creencias de una nación con imposiciones en asuntos de moral no es el camino recto.
Con decencia, patriotismo, contundencia en la defensa del ciudadano, y con una experta gestión de los pocos o muchos recursos de la nación, se puede ir muy lejos.
El Partido Popular es, hoy por hoy, la única opción posible para el que, libre de rencores y prejuicios, quiere vivir en democracia justa y cabal. No me vengan con partiditos, que solo buscan la promoción de sus creadores. El partido socialista se ha enterrado solo, y aunque aun recogió muchos votos y posee un suelo de millones de ellos, la realidad es que los votantes a dicho partido tienen muy escasa consideración por parte de lo que se suele llamar el Pueblo en general.
Con los hechos sucedidos en estas dos legislaturas, de persecución a todo lo que no fuera sus tendencias y hasta caprichos, no es normal que en medio de una debacle de tal envergadura, todavía haya quien vote a un partido que lleva a la ruina a España, y que ha demostrado ser corrupto hasta la saciedad. Los que nos equivocamos, estamos hoy decepcionados hasta un punto de no retorno.
Para poner a España patas arriba, ir contra la decencia tanto económica como moral, y establecer un leninismo de pandereta, con los comunistas tenemos de sobra. Lo que deseamos todos es una izquierda que navegue por encima de rencores, tipo memoria histórica, y que fustigue la puntual perversión del capitalismo. Con sus imposiciones y abusos, estamos convencidos de que este socialismo puro y duro, no es la receta que necesitamos.
Lo que necesitamos es una izquierda compacta, y con intenciones de engrandecer el país, y demostrar que son mejores que los demás. Para alimentar rencores, y volver la tortilla con “otros medios”, para crear una nueva aristocracia política incivilizada, arbitraria y ramplona, que denunció Milovan Dilas en su libro “La nueva clase” no los necesitamos. El Pueblo los ha rechazado.
Una izquierda distinta, que admita que haya otra forma de pensamiento político y moral, y que desde luego no intente hacer ingeniería social, de la que ya tenemos muestras de adonde lleva esta clase de mutación política. La democracia es reconocida como el “menos malo de todos los sistemas políticos”, como decía Winston Churchill.
Por fin un artículo lúcido de alguien. Gracias. El ahorro este año irá encaminado a pagar el IBI y la declaración de la renta. ¡Que consuman ellos! Y que se pudra el pequeño comercio y el pequeño propietario. Hice bandera de la abstención y no sabe lo contento estoy hoy. ¿A que este barbas es capaz de empatarle a Zapatero? Cuando lo que falla es el modelo de Estado el tío viene a decir que lo que falla es la recaudación fiscal del Estado. ¿De dónde ha salido este botarate? Con razón decían los socialistas que el recambio no mejoraba su Bambi. Estamos rodeados.
No sabemos lo que ocurrirá cuando Rajoy entre a gobernar, pero creo que será una época de sobresaltos, huelgas, y numerosas incursiones por parte de los “indignados”, que ahora incrementarán las acciones violentas. No vale decir que han ocupado una plaza pacíficamente, porque todo lo que se hace en contra de la autoridad, y del interés de la ciudadanía es violencia. Si las iglesias (por ejemplo) creen que ya llegó la paz se equivocan, porque ahora empieza el "tango", no los "brotes verdes".
Eso nos espera, en la etapa en que gobierne el PP. No es de mi interés el que el PP “se suba a la parra”, y sea el rodillo que lo arrolle todo. Me gusta que todos hablen, y lleguen a acuerdos en los que lógicamente todos tienen que hacer sacrificios tácticos, para sacar a España de la lastimosa situación a la que le ha llevado este gobierno saliente, que no sé que espera para entregar los trastos.
Yo solo deseo un gobierno honrado, y con miras de futuro. Unos partidos que sean transparentes, y al que se salga duro con él. Ahora queda el PP como “cabaña de melonar” cuando termina la recogida. No sé como se las van a arreglar para “sin molestar a la fuerzas sociales” hacer resurgir a España del desierto en que se ha convertido. Esto es un túnel, de donde no vamos a salir.
Ya no voy a dar datos macroeconómicos que tanto gustan de manejar los sabihondos, sino del tipo que tristemente se fuma un cigarro en su tienda, repleta de género magnífico, y sin compradores así haga hasta el 70%, como escribe en grandes letras sobre sus escaparates.
Esos no engrosan el paro, porque arruinados no saben que hacer, porque tienen comprometidos todos sus haberes, y si no pueden pagar a los fabricantes proveedores, estos también tienen que cerrar o verse comprometidos en sus inversiones. Las farmacias que antes eran tan buscadas, ahora lo que quieren es vender porque no pueden pagar a sus proveedores. Y estos no pagan, y la siniestra cadena continuará.
Son llamativas, las divagaciones que argumentan los invitados a las tertulias, cuando desde una posición mas de lealtad a sus jefes de la “izquierda” que al bienestar de España, tratan de justificar el derroche inaudito de dinero español, para las mas estúpidas causas que se puedan concebir. Ahora, todo se vuelve sobre como refinanciarnos, cuando ya no hay quien se fíe de nosotros… por la razón de que no se puede uno fiar de los informales.
Genial. Y totalmente cierto, qué indignante resulta todo esto.