Oiga Don Juan, yo no soy precisamente tonto. Mi CI es alto y mis conocimientos sobre muchas materias también. Leo sus artículos con atención para aprender más sobre el fascinante mundo de la economía política. Aun así en bastantes artículos suyos no me entero de la misa la media. Usted parte del supuesto falso de que sus lectores tenemos unos conocimientos mínimos sobre los conceptos económicos que nos harán entender sus artículos pero no es así. Muchísimos lectores suyos no tenemos esos conceptos básicos y como carecemos de ellos somos incapaces de entender conceptos más amplios como sus artículos. Debería usted poner un link en todos sus artículos que llevara a un sitio dónde esos conceptos básicas se explicaran con sencillez, claridad y concreción, de modo que ante cualquier duda del lector pudiera ir a ese link para después de asimilar los conceptos básicos volver al artículo para entenderlo bien.
Antológico artículo, don Juan Ramón. Parece que va a formar parte de una serie.
La base de todo es la coerción del Estado, pero somos borregos tan acostumbrados a la cerca eléctrica que ya ni la vemos. No tenemos consciencia de la libertad que perdemos y de como muchas de las aparentes fallas del capitalismo las origina este sistema mixto que utiliza el poder creador de la economía libre en beneficio de la casta política parasitaria y sus machaquis y grupos de interés.
La tiranía se ha ido ocultando tras la costumbre y estos mecanismos que, de puro burdos, ya no vemos. Sutilezas mayores han desentrañado otras ciencias, pero ahí no hay intereses materiales tan directos. Es curioso cómo hay una cierta oscura intuición cuando la gente habla del "poder del dinero y la especulación sobre la economía real" o del "consumismo" (ya que nos vemos obligados a "quemar" el dinero, pues ahorrarlo no es posible -lo era con el oro-).
Lo más importante de su artículo, para mí, ha sido el patentizar que los que viven de los demás tienen con el medio que Vd. denomina "política monetaria", la palanca y la llave maestra que canaliza en su beneficio toda la potencia y la fuerza que genera una sociedad.
Tal poder incontrastado es la mayor amenaza de la democracia y la libertad mientras no haya conciencia del hecho y no se incluyan limitaciónes de índole constitucional a tal prerrogativa de los estados.
Me gustan mucho tus artículos sobre economía, Juan Ramón. Haces que alguien que no ha estudiado economía, como yo, comprenda muchas cosas. Pero sigue pareciéndome increíble que, a estas alturas, defiendas el copago sanitario como hiciste en otro artículo cuando no es más que un repago. No es copago cuando uno tiene que pagar dos veces por lo mismo.
Una demostración palmaria de lo que dice el autor es el fenómeno del dolar norteamericano en los paises de centroamérica y sudamérica.
En la República Dominicana, por ejemplo, circula el Peso Dominicano que tiene un cambio de unos 33 por dolar. Pero ciertos bienes se venden solo en dólares: apartamentos, coches de gran cilindrada, joyas, etc. La gente atesora dólares y éste circula libremente. En cualquier negocio le aceptan sus dólares (eso si, procurando beneficiarse en el cambio) y la tasa se publica diariamente como si se tratase de la previsión meteorológica. El dinero malo (el peso) tiene tendencia a comprar dinero bueno(los dolares) por eso el dolar NUNCA se ha depreciado en este país, aunque en el resto del mundo ande por los suelos.