La situación de las últimas semanas en Italia está poniendo en peligro al Gobierno de Silvio Berlusconi hasta el punto de que han sido muchos los rumores que han afirmado que Il Cavalliere pensaba dimitir este mismo lunes. Eso sí, el primer ministro italiano no ha tardado en desmentir estas afirmaciones en una conversación telefónica con uno de sus diarios afines, Libero.
Curiosamente, los rumores de dimisión han tenido un efecto alcista en la Bolsa de Milán que ha cerrado con una subida del 1,32% siendo la única que ha cerrado en verde en una mala jornada en los parqués del Viejo Continente.
Lo cierto es que la tensión en el seno del ejecutivo italiano ha puesto a Berlusconi en una situación muy complicada con el continuo abandono de los diputados de su partido a la oposición. La "traición" de sus compañeros de partido, posicionados en contra de la forma con la que el primer ministro pretende acometer las reformas económicas exigidas por sus socios europeos, ha obligado a Berlusconi a someter dichas reformas a un voto de confianza "porque quiero ver la cara de quiénes me traicionan", ha advertido.
Con la prima de riesgo italiana cercana a los 500 puntos (ha cerrado en 471 puntos), la economía italiana carece de toda credibilidad y está ahogando a Il Cavaliere como ninguno de sus anteriores escándalos lo había hecho. La UE presiona para ver encima de la mesa un paquete consistente de medidas de ahorro, mientras sus socios de Gobierno rechazan cualquier cambio que pueda suponer un coste electoral. Mientras, Berlusconi se encuentra en medio de este fuego cruzado, sometido a una gran presión por parte de Alemania, Francia y la Liga Norte. Nunca antes, en sus años como primer ministro en esta última etapa había parecido tan cercana su caída. Lo que no consiguió Ruby Rompecorazones, podría lograrlo la prima de riesgo.
La traición de sus compañeros de partido
La alusión de Berlusconi a la posible "traición" de la que puede ser objeto se refiere a los últimos abandonos de diputados del PDL, que han decidido pasarse a la oposición por su desacuerdo con la forma en que está abordando las reformas económicas que le exigen los socios comunitarios. El desmentido llega después de que el portavoz del PDL en la Cámara baja, Fabrizio Cicchitto, negara que el primer ministro fuera a dimitir, como habían apuntado esta misma mañana dos diarios cercanos a Berlusconi, entre ellos el propio Libero.
El director de uno de ellos, Il Foglio, Giuliano Ferrara, había incluso afirmado en la edición digital de su diario que la dimisión de Berlusconi era "cuestión de horas", algo que matizó posteriormente en un nuevo editorial.
Mientras tanto, Berlusconi pasó la jornada en su residencia de San Martino en Arcore, cerca de Milán (norte de Italia), reunido con sus dos hijos mayores, Marina y Piersilvio, y con el presidente del grupo televisivo Mediaset, Fedele Confalonieri. Medios italianos apuntan a que esta noche el primer ministro puede encontrarse con su socio de Gobierno, Umberto Bossi, líder de la Liga Norte.
La oposición, por su parte, se reunirá mañana para consensuar una postura de cara a la importante votación en la Cámara de los Diputados sobre la cuentas del Estado de 2010, que no fueron aprobadas el pasado 11 de octubre al producirse un empate de 290 votos, y estudiar la posibilidad de presentar una moción de censura a Berlusconi.
La prima de riesgo disparada
La prima de riesgo de Italia alcanzó los 490 puntos básicos, lo que supone un nuevo récord desde la creación del euro. Además, el tipo de interés de estos bonos en el mercado secundario también registró un nuevo máximo histórico, al llegar a situarse en el 6,66%. Tras registrar importantes caídas durante las primeras horas de cotización, la Bolsa de Milán se dio la vuelta debido a los rumores sobre una posible dimisión de Berlusconi y cerró con ganancias.
Italia era este lunes un hervidero de suposiciones y los medios de comunicación jugaban con todo un abanico de probabilidades a corto plazo, con la mirada puesta en la dimisión de Berlusconi. Si esto ocurriera, para el diario Corriere della Sera una de las posibilidades sería la formación de un Gobierno técnico, una opción que agrada a la oposición, con una persona al frente reconocida nacional e internacionalmente y no ligada a un partido.
Esa persona, a la que muchos medios de comunicación identifican con el excomisario europeo Mario Monti, debería llevar a cabo las reformas económicas a partir de las medidas impuestas por Europa y después cambiar la ley electoral que premia a la mayoría -más escaños a la coalición que consiga más apoyos- y pone un límite del 4 % de los votos para impedir la proliferación de pequeños partidos.
Desde la UE también se han sucedido los mensajes. Incluso, el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rhen, a llegado a utilizar una metáfora futbolística al invitar a Italia a jugar al catenaccio (cerrojo) en materia de consolidación fiscal con el fin de garantizar que se cumplan todos sus objetivos de reducción del déficit y deuda.