Que el chocolate tiene propiedades beneficiosas para la salud de quienes lo consumen (con moderación, claro está) es una teoría que vienen defendiendo muchos médicos españoles desde hace varios años. Pero ahora, debido a la crisis económica, los especialistas también apuntan a que este alimento está siendo utilizado por los afectados para levantar su estado de ánimo.
Sea por un motivo u otro, lo cierto es que la industria chocolatera es uno de los sectores que más se ha resistido a la crisis en los últimos años. Y fue exactamente hace dos, cuando José Antonio Herrera, cansado de su trabajo de comercial de publicidad, vio en este producto la oportunidad a la que aspiran un gran número de asalariados en la actualidad: tener su propio negocio.
Por esta razón se embarcó en Xocoa y decidió convertirse en propietario de una de las franquicias de esta empresa, especializada en la fabricación y comercialización de productos de chocolate.
Pregunta (P): ¿Por qué decides embarcarte en el negocio de chocolate? Los expertos lo han señalado como el antidepresivo perfecto contra la crisis, ¿tiene algo que ver?
Respuesta (R): En cierto modo sí. Cuando ya había decidido que quería llevar las riendas de mi propia empresa y me encontraba en la fase de decidir en qué sector introducirme, vi un reportaje sobre el chocolate en el que, básicamente, decían que por sus propiedades beneficiosas era uno de los sectores que menos había sufrido la grave situación económica y fue el motivo principal para lanzarme.
P: ¿Qué aspectos hay que tener en cuenta cuando se decide apostar por el sector chocolatero?
R: Básicamente, que es un producto muy de temporada. En Navidades se trabaja mucho, pero el verano se hace muy duro y bastante largo.
P: ¿Por qué elegiste la franquicia como modelo empresarial?
R: Porque a través de la experiencia de terceros y de un producto que ya está dentro del mercado podía empezar en un tipo de negocio que me era totalmente desconocido.
P: ¿Y cuál es la parte negativa de ser un franquiciado?
R: Lo peor es que pierdes control sobre tu empresa. Muchas decisiones no las tomas tú y a veces haces cosas que, de ser una decisión estrictamente personal, no harías o lo harías de otra forma.
P: ¿Cuáles son los recursos económicos que se necesitan para empezar un proyecto como este?
R: Unos ahorrillos y un buen proyecto para que el banco te deje la diferencia. En nuestro caso hicimos una inversión inicial de cerca de 40.000 euros.
P: ¿Has tenido problemas para financiarte?
R: Tuve que ir a varias entidades para obtener el crédito, supongo que es lo normal en estos tiempos. De hecho, tres entidades nos lo denegaron hasta que una cuarta aceptó.
P: ¿Dónde está la clave para obtener el éxito en tu negocio?
R: Hay que innovar y ofrecer a la gente cosas nuevas, mezclas diferentes y sugerentes con una imagen perfecta. En este sector, además, nunca puedes olvidar los productos clásicos que los clientes te siguen demandando. Tenemos que mantener un equilibrio entre las dos cosas: lo atrevido y lo tradicional.
P: ¿Has seguido alguna estrategia comercial anticrisis?
R: Sí y no. No, porque he seguido dando el mismo servicio al cliente, lo cual es bueno, pero siempre intentas ser más competitivo en cuanto a precios.
P: Al ser un empresario principiante, ¿en que fuentes de información te apoyaste para desarrollar tu actividad?
R: En dos. En Internet para la información comercial, y en la Cámara de Comercio de Madrid para todos los trámites burocráticos, que son muchos.
P: ¿Qué consejos le darías a los que se han decidido por la franquicia?
R: Informarse y prepararse antes. Sé que es obvio, pero es lo más importante.
P: ¿Es inevitable darse algún batacazo a pesar de estar bien informado?
R: Por supuesto. En mi caso esos batacazos me hicieron darme cuenta de que algo tan simple como el escaparate es imprescindible para hacer que el producto sea apetecible y se venda, y no es tan fácil como parece hacerlo bien.
También tienes que saber analizar muy bien las campañas para no pasarte con el stock. Muy poca gente suele querer turrones después de las Navidades y a mí en el primer año se me acumularon grandes cantidades de este producto que luego no pude colocar. Estas experiencias te hacen no cometer nunca más esos errores, claro.
P: ¿Qué futuro le espera a este establecimiento?
R: En un futuro inmediato le espera mucho trabajo, pero es complicado pronosticar nada a largo plazo.