En concreto, los bonos españoles a diez años ofrecían pasados unos minutos de la apertura de los mercados del Viejo Continente un rendimiento del 5,200%, lo que implicaba un diferencial respecto al bund de 337,5 puntos básicos.
Por su parte, la prima de riesgo de la deuda italiana se situaba en 378,3 puntos básicos, con un rendimiento del 5,607%, mientras que los bonos portugueses rendían al 11,215%, con un diferencial de 938,3 puntos básicos.
Asimismo, el diferencial entre los bonos irlandeses y los alemanes alcanzaba los 605,3 puntos básicos, con un rendimiento del 7,207%, mientras que en el caso de los bonos griegos, el spread llegaba a 2.092,6 puntos básicos, con un rendimiento del 22,594%. En el mercado de divisas, el euro cedía posiciones frente al billete verde y cotizaba a 1,3333 dólares, frente a los 1,3336 dólares de la apertura.