No podría estar más de acuerdo. Uno de los principales males de España es queno se cumple la Ley.
ZP eliminó la normativa, consensuada por Aznar, sobre la limitación del gasto y la deuda, control presupuestario, y ahora pretende establecerlo en la Constitución, esa Constitución que se ha moldeado como si fuera plastilina para ajustarla a las conveniencias políticas del momento. No creo se haga cumplir el control presupuestario ni aunque se modifique la Constitución para ello por más que lo exija la Sra. Merkel ni el BCE; aumentarán las facturas que se meten en el cajón para cumplir el endeudamiento y la reducción del gasto.
Si no hay tope de gasto, no hay tope para la cantidad que uno se puede embolsar vía EREsandaluces, BOEs, Hípicas, aeropuertossinpasajeros, avessinpasajeros, trajes, cursosdeformación, memoriashistóricas... Ese es el cuento lecheril de los keynesianos y no otro. "Si el estado ha de gastar un euro menos de lo que ingresa -piensan, ellos- ¿qué me voy a llevar a casa? Acaso ¿sólo el sueldo? Para eso no hemos venido, y venir para nada es tontería".