El precio de la onza de oro al contado cerró este miércoles en un nuevo récord, 1.790 dólares, en el mercado de Londres. Se trata del segundo récord consecutivo tras los 1.782,50 dólares en los que cerró el martes, y el tercero en una semana.
La reunión entre el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel, que propusieron este martes la instauración de "un verdadero gobierno económico" en la zona euro, parece que no ha sido suficiente para calmar a los mercados europeos. Las principales bolsas europeas abrieron este miércoles sus respectivas sesiones con pérdidas.
Ambos mandatarios abogaron por fijar un techo máximo de déficit para los países del euro, que debería incluirse en sus respectivas constituciones antes que tomar otras medidas como la creación de los eurobonos o la ampliación del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera.
Con este nuevo récord, el oro corrobora su tendencia alcista que experimenta esta materia prima desde el arranque de la crisis, en paralelo a la caída de los mercados bursátiles en Europa y Estados Unidos. Ello se debe, a la fuerte demanda debido a los continuos recelos de los inversores a invertir su capital en otros menos seguros. El oro continua siendo el refugio de los inversores.