El holding resultante de la fusión Iberia-British, IAG, registró en el primer semestre unos beneficios consolidados de 88 millones de euros frente a pérdidas de 352 millones en el mismo periodo del ejercicio anterior, según informó la compañía en un comunicado, que precisa que estas cifras excluyen 21 días de Iberia previos a la fusión.
La cifra de negocio semestral del grupo alcanzó los 7.537 millones de euros, lo que representa una mejora del 74,2% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, cuando ingresó 4.326 millones.
Incluyendo los 21 días de Iberia antes de la fusión, la sociedad registró un beneficio después de impuestos de 71 millones de euros frente a pérdidas de 252 millones, e ingresó 7.775 millones, un 17,9% más.
Esta mejora en los ingresos refleja "el regreso a la rentabilidad operativa", según explicó el consejero delegado del grupo, Willie Walsh, quien detacó que se mantiene el fortalecimiento del negocio business.
No obstante, Walsh advirtió sobre los riesgos derivados del encarecimiento del crudo. De hecho, la factura de combustible de Iberia alcanzó los 2.439 millones de euros en el periodo, lo que supone un incremento del 34,8%.
La compañía prevé registrar en el ejercicio completo unos costes por combustible de 5.200 millones de euros, aunque dice haber recuperado el 50% del efecto de dicho coste en el primer semestre a través de iniciativas de ingresos.