El presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, no descartó este jueves un impago parcial de la deuda griega bajo un nuevo programa de rescate a Grecia, aunque dijo que se debe hacer todo lo posible para evitar ese escenario. "Uno nunca puede excluir esa posibilidad", pero "debe hacerse lo posible" para evitarla, señaló Juncker a su llegada a Bruselas, donde participa en la cumbre extraordinaria de jefes de Estado y de Gobierno de la zona del euro, informa EFE.
El también primer ministro de Luxemburgo dijo además que ve poco probable que los líderes de la zona del euro acuerden una tasa bancaria para implicar al sector privado en el segundo rescate de Grecia. "No creo que se llegue a un acuerdo sobre la tasa", afirmó.
Las palabras de Juncker sobre la posible caída de Atenas provocaron una inmediata reacción de los mercados. El euro caía con fuerza a media jornada y hacia las 12.30 (hora español) se cambiaba a 1,4145 dólares. La moneda única se había cambiado a 1,4272 dólares en las primeras horas de la negociación europea.
Un buen acuerdo
Juncker negó asimismo de nuevo que el euro esté en peligro, pese a la crisis de la deuda y el acoso de los mercados sobre varios países periféricos, incluida España, y se mostró convencido de que los líderes de la zona del euro cerrarán un "buen" acuerdo global en la cumbre extraordinaria que se celebra hoy en Bruselas.
"El euro no está en peligro porque ha sido, a pesar de los elementos de crisis, estable", señaló. "Necesitamos una solución global porque no nos podemos reunir cada dos semanas" ni tampoco aportar cada 14 días "soluciones parciales", aunque después queden los trabajos técnicos, afirmó.
"Creo que vamos a encontrar hoy una buena solución", añadió Juncker, quien calificó de "útil" la reunión franco-alemana que se celebró ayer entre la canciller germana, Angela Merkel, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy, en Berlín y en la que acordaron una línea común ante la cumbre. "Eso facilita la decisión" sobre el segundo rescate de Grecia y las medidas para atajar la crisis de la deuda europea, recalcó.
Juncker insistió en que en el acuerdo que los jefes de Estado y de Gobierno pretenden cerrar hoy "habrá participación del sector privado", el factor que más ha obstaculizado el segundo rescate de Atenas y que ha generado una gran desconfianza en los mercados, que ha salpicado sobre todo a Italia y a España.