La directora gerente del Fondo Monetario Internacional, la francesa Christine Lagarde, ha pedido a los ministros europeos de Finanzas una rápida aplicación de las medidas de respuesta a la crisis de la deuda que amenaza con extenderse por la zona euro, informa EFE.
En un comunicado difundido con motivo de la declaración del Eurogrupo del pasado lunes, Lagarde elogia, en nombre del FMI, el compromiso renovado de los gobiernos del euro con la estabilidad financiera de la zona.
Y añade: "Esperamos que habrá una aplicación rápida de las medidas importantes bosquejadas en la declaración de los ministros", en alusión a las medidas adicionales que los europeos estudian para mejorar la capacidad de frenar el riesgo de contagio.
En su declaración, Lagarde también celebra el hecho de que los ministros hayan reconocido "la necesidad de una respuesta más amplia y una política que mire más hacia adelante, al ayudar a Grecia en sus esfuerzos por restaurar el crecimiento y la competitividad".
"El FMI seguirá trabajando en estrecha colaboración con Grecia y los socios europeos en respaldo de tales objetivos", concluye la declaración de Lagarde.
Ayer la directora gerente alabó los esfuerzos de Grecia para reducir el déficit, pero aseguró que no es suficiente y "hay que hacer más".
"Grecia ha hecho mucho para reducir el déficit y lograr una consolidación fiscal en el rango de cinco puntos porcentuales del Producto Interior Bruto (PIB)", dijo Lagarde en un encuentro con un pequeño grupo de periodistas.
"Es un logro significativo pero no es suficiente. Hay que hacer más", subrayó la ex ministra de Finanzas francesa que asumió la semana pasada las riendas del FMI, la primera mujer que ocupa el puesto.
Sus declaraciones coincidieron con la reunión de ministros de Finanzas de la zona euro celebrada en Bruselas, en la que abordaron la crisis griega en un contexto de grandes tensiones en los mercados que afectaron a la deuda española e italiana.
Los ministros del euro se mostraron dispuestos a mejorar la flexibilidad y alcance del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (EFSF, en inglés), para asistir a países con problemas de financiación, así como aumentar los plazos de devolución y bajar los intereses aplicables a los préstamos de los países rescatados (Portugal, Irlanda y Grecia).
El FMI, que participa en los rescates de los estados europeos con problemas de solvencia, aprobó el viernes el desembolso de 3.200 millones de euros para Grecia y pidió al país una rápida y enérgica implantación del programa de ajuste.
El monto aprobado el viernes es parte del rescate conjunto con Europa de 110.000 millones de euros, acordado en mayo de 2010, y llega después de que la zona euro liberara a principios de mes un paquete de ayuda de 12.000 millones de euros para asistir de forma inmediata a Grecia.