Y reformas constitucionales, y judiciales, y seguridad jurídica. No puedo olvidarme tampoco de la educación, por supuesto.
Si se dan cuenta, está todo tan podrido que hay que reformarlo todo, y no lo van a hacer aquellos que por acto u omisión nos han mentido y llevado a esta situación. A nosotros, los que siempre terminan pagando.
Respecto a que hablen las urnas, no hay uno solo que me parezca decente. Todos han participado desde pequeños de la teta del partido, todos tienen el virus en el cuerpo. El sistema está podrido, y todo aquél que participa de él termina pudriéndose.
Esta editorial ha dado unas soluciones que no servirían realmente para nada, ya que es imposible que las lleven a cabo los sujetos que tienen el cargo y la responsabilidad -desde los gobernantes hasta los opositores- para llevarlas a cabo.
Hay que replantearse todo el Estado eliminando una buena parte de él.
La liberalización de la economía es imprescindible. Este es un estado con economia planificada para beneficio de políticos, sindicatos, banca y grandes empresas, y las migajas para el pueblo.
Mientras que no se eche de la mayoría parlamentaria al PSOE y a las formaciones que le apoyan no hay solución y ya veremos la que nos prepara RuGalCara con sus secuaces de la calle y mediáticos