Los cerca 396 expertos y empresarios consultados por el Consenso Económico de PwC opinan que se sigue sin ver una salida a la crisis y piden al Gobierno "reformas urgentes" para mejorar la competitividad y la productividad, entre las que destacan un contrato único con indemnización creciente.
El 72% de los panelistas califica de malo o muy malo el momento coyuntural de la economía española y no espera que la situación mejore en 2011. De hecho, un 77% cree que el PIB caerá entre un 1,5% y un 0,5% este año y que crecerá solo un 0,7% en 2012. Además, un 80,1% de los consultados cree que se mantendrá la creación de empleo en los próximos seis meses y un 12,1% estima que descenderá, según recoge Europa Press.
En la base de este pesimismo está lo opinión de que ni el consumo privado ni la demanda de vivienda se recuperarán durante estos años, e incluso irán a peor, sobre todo por la percepción desfavorable de la situación económica y financiera de las empresas, visión compartida por un 88,5% de los panelistas.
Las buenas noticias vienen de las exportaciones y la inflación. El 71,9% de los encuestados estima que seguirán aumentando las ventas al exterior hasta finales de este año, mientras que la inversión productiva y la creación de empleo permanecerán estancadas.
Además, la opinión generalizada es que la inflación se modere en los próximos meses y que los precios desciendan hasta el 2,9% al cierre de 2011, para situarse en una tasa del 2,5% en 2012. Asimismo, se espera que los tipos de interés se mantengan en el 1,5% hasta final de año y que suban hasta el 1,75% o el 2% ya en junio de 2012.
Contrato único y más educación
A la vista de este panorama, casi siete de cada diez expertos y empresarios apuestan por que el Gobierno emprenda reformas para mejorar la competitividad, empezando por un contrato único con un coste de indemnización creciente con la permanencia en el puesto de trabajo. Y es que un 70,9% asegura que la "alta protección" de los trabajadores dificulta la contratación de los jóvenes cualificados.
Además, el 74% de los panelistas cree que la formación universitaria no está a la altura de las demandas de la economía y, en su mayoría, consideran que una mejora de la cualificación de los trabajadores mediante programas de formación incidiría positivamente en la productividad.
En tercer lugar, el 83,3% pide un sistema fiscal que prime la especialización de las empresas en áreas intensivas en el uso de las nuevas tecnologías. Sin embargo, existe un reparto de posturas entre los que están a favor de sustituir cotizaciones sociales por un IVA más elevado –en su mayoría empresarios– y los que desestiman esta opción.
Más unánime (74,7%) es la crítica a la existencia de distintas legislaciones autonómicas y a los efectos negativos que ello tiene sobre la competitividad.