La vicepresidenta segunda y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, ha admitido que España sigue estando "en el punto de mira" de los mercados financieros, y añade que si bien la prima de riesgo puede alcanzar los 300 puntos básicos será algo "puntual".
Salgado indicó, en declaraciones a TVE recogidas por Europa Press, que en un momento determinado "de tensión" como el actual, a la espera de que el Parlamento griego apruebe un nuevo paquete de recortes, es lógico que la prima de riesgo con el bono alemán llegue a los 300 puntos básicos, si bien apuntó que será de manera "puntual" y que en ningún caso permanecerá en este nivel de forma permanente.
La ministra afirmó que España "no va a estar en el límite" del rescate, a pesar de reconocer que el país está sometido "a muchísima tensión". "España se sigue financiando muy bien; cada vez que hacemos una emisión no tenemos ningún problema y recibimos peticiones que son cuatro veces más de lo que demandamos", reiteró.
Pese a ello, admitió estar "preocupada" por el aumento de la prima de riesgo, que este lunes ha superado los 290 puntos básicos, aunque volvió a insistir en que España se está financiando bien y que los intereses de la deuda que ahora paga suponen la mitad de lo que pagaba en 1994.
Rescate
"Es verdad que seguimos estando en el punto de mira, aunque mucho menos que hace unos meses, pero ninguno de mis colegas en las últimas reuniones ha preguntado por el caso de España, luego los países europeos tienen tranquilidad con respecto a las reformas que estamos llevando a cabo y con respecto a la reducción del déficit. Hay tranquilidad con respecto a España, pero intranquilidad con la zona euro", subrayó la ministra.
Sin embargo, estas declaraciones contrastan con las del ministro de Finanzas irlandés, Michael Noonan, ya que el domingo afirmó que los dirigentes europeos están más preocupados por un contagio de la crisis de la deuda soberana a España que a economías más pequeñas, como Irlanda o Portugal y que una economía como la española estuviera en peligro, se utilizarían "otros instrumentos".
"Los dirigentes con los que he hablado creen que pueden evitar un contagio de Irlanda o Portugal, pero temen por países europeos más grandes y es allí donde van a situar la frontera", ha declarado. "Supongo que pondrán otros instrumentos sobre la mesa conforme sea necesario".
Se aplaza el fondo austríaco
Por otra parte, Salgado adelantó que el Gobierno aplazará un año la puesta en marcha del 'fondo austriaco' contemplado en la reforma laboral para el mes de junio, dado que el comité de expertos creado por el Ministerio de Trabajo ha indicado que para ello sería necesario aumentar las cotizaciones sociales y, según Salgado, en este momento "no parece oportuno".
Salgado se refirió también a la idea de introducir en el mercado financiero español la dación en pago en el caso de las hipotecas y apuntó que se trata de una posibilidad que ya existe, si bien en estos casos los bancos sólo conceden el 50% o el 60% del valor de la vivienda, lo que deja fuera del acceso a la misma a las familias más desfavorecidas o a los jóvenes. En cualquier caso, se mostró partidaria de estudiar que los bancos ofrezcan esta posibilidad de una manera más "transparente" y más extendida.
Preguntada por si existe inquietud en la UE por el movimiento 15-M, Salgado ha asegurado que los miembros del eurogrupo "preguntan por curiosidad, pero sin preocupación", y ha dejado claro que, si bien el Gobierno está escuchando sus demandas, considera que "no se proponen medidas concretas ni factibles". "Entre estas propuestas e iniciativas hay algunas que será posible atender, pero hay otras que no", apostilló.
El papel de las agencias de rating
Uno de los objetivos de estas protestas son las agencias de rating, a las que Salgado consideró necesarias. "Hoy por hoy las necesitamos porque en la medida en que tenemos que pedir dinero prestado, aquellos que nos lo van a prestar nos exigen una valoración independiente", explicó.
Sin embargo, al ser preguntada sobre si está garantizada esa independencia, Salgado admitió que las agencias de rating lanzan algunas de estas valoraciones con cierto "sentido de la oportunidad", y que "no es fácil improvisar" un organismo internacional que vele por que no existan "conflictos de intereses".
Finalmente, defendió el endurecimiento fiscal introducido en la tributación de las sicav, y adelantó que ha provocado una reducción del número de las mismas en España, por lo que rechazó igualar su tributación a las rentas del trabajo, dado que son instrumentos importantes de inversión y ahorro que podrían irse a otros países.