El primer ministro griego, el socialista Yorgos Papandréu, advirtió el domingo que si no recibe en junio el quinto tramo de la ayuda externa de 12.000 millones de euros, su país entrará en quiebra. "Esa opción (no recibir el dinero) significaría la quiebra", declaró el mandatario en una entrevista exclusiva publicada el domingo por el periódico ateniense Eznos.
Desde que la zona del euro y el Fondo Monetario Internacional (FMI) otorgaron a Grecia un rescate trienal de 110.000 millones de euros hace un año, Grecia ha recibido 53.000 millones de euros y espera otros 8.700 millones de parte de la zona del euro y 3.300 millones del FMI en el mes de junio.
Por otra parte, el diario ateniense Kazimerini asegura que el Estado helénico tiene dinero sólo hasta el mes de julio y que los acreedores extranjeros "exigen que un nuevo programa de austeridad sea aprobado por el Parlamento con la mayor cohesión posible".
Pese a que el partido gubernamental PASOK cuenta con 156 diputados y se necesitan 151 para la mayoría absoluta, un respaldo más amplio significaría unos 180 escaños, en casos especiales, como lo dicta la Constitución helena.
Papandréu puntualizó que "es indispensable que se implemente el programa de ajuste fiscal y reformas" en alusión a una programa para recaudar 76.000 millones de euros hasta 2015 con recortes de gastos públicos, reestructuración de activos del Estado y privatizaciones de empresas y bienes públicos.
Los expertos del FMI y la Unión Europea llegarán esta semana a Atenas para revisar en detalle el nuevo programa, del que dependerá un rescate adicional de unos 60.000 millones de euros. Papandréu considera el nuevo programa "no sólo como un plan para reducir el déficit, condición para que el país sobreviva, sino que una hoja de ruta para la creación de una nueva Grecia".
El jefe de Gobierno destacó la necesidad de acelerar el programa de privatizaciones y empezar ya en junio, es decir, "lo antes posible", aunque excluyó que pasen a manos privadas empresas de servicios públicos.
El Ministerio griego de Finanzas publicó la semana pasada una lista de privatizaciones de empresas que incluye la venta de las quinielas, loterías, apuestas hípicas, las autopistas, la administración de aeropuertos, entre otros.
El presidente del eurogrupo, Jean Claude Junker, propuso ayer que se creé un servicio europeo independiente para el Estado griego que supervise las privatizaciones para realmente obtener en cuatro años los 50.000 millones de euros previstos. Por otra parte, Papandréu reconoció que "no se ve por el momento que Grecia esté en condiciones de cumplir sus obligaciones saliendo a los mercados financieros en 2012", informa Efe.
En todo caso, prometió que no retrocederá y llamó a todas las fuerzas políticas griegas a apoyar al Gobierno, "ya que lo que está en juego no es si este Gobierno tendrá o no éxito, sino la mera supervivencia del país".
Papandréu afirmó que "la reestructuración de la deuda está fuera de cuestión tanto para Grecia como para sus socios" e indicó que según la autoridad de estadística europea (Eurostat), la economía griega crecerá por primera vez en 2012, con un magro 1,1%. Grecia tiene una deuda pública del 143 % del Producto Interno Bruto (PIB), que se estima alcanzará el 166 % en 2012 debido a persistente recesión y déficit, que el año pasado fue del 10,5%.