Je, je, lo que me sospechaba.
Meteos en Stockchart.
Seleccionad el símbolo $CRB, índice agregado de materias primas (perdonad por el toque Keynesiano de agregar todas las materias primas en un índice).
Cuando lo tengáis, en el Symbol poned $CRB:$Gold y poned el máximo tiempo que permiten si no estás suscrito: 3 años.
El resultado es aleccionador: en onzas de oro, el precio de las materias primas es la mitad que el que había a mediados de 2008.
Me sorprende que en un medio "austriaco" se de pábulo a semejante sarta de majaderías.
Aplicar la estadística a un ámbito condicionado por la actividad humana, para intentar predecir su evolución futura, no tiene sentido porque, debido a la creatividad humana, el futuro es irreductiblemente incierto y la estadística es una forma de presentar la información del pasado que puede tener cierto poder de inferencia en fenómenos con un alto grado de recurrencia que no se da en la actividad humana, donde no hay constantes, todo son variables.
Gracias a la creatividad humana, los recursos escasos no son una restricción. Un sistema de inyección que reduzca el consumo de combustible a la mitad equivale a duplicar las reservas del mismo.
Puede haber situaciones puntuales de exceso de demanda sobre los precios, pero el problema de fondo es que la estafa del dinero fiduciario cada vez cuela menos y lo que se está produciendo es la devaluación de los papelitos tintados respaldados por leyes de curso forzoso respecto a las materias primas.
Sería interesante conocer la evolución de los precios de dichas materias primas en onzas de oro.
Pedazo de artículo.
Enhorabuena.
Curioso y peculiar informe. La verdad es que en su elaboración no se ha tenido en cuenta la aplicación del coeficiente K en los cálculos, lo que provoca resultados tan sorprendentes.
Tras la aplicación del coeficiente K, la cosa quedaría como siempre: la oscilación lógica y rítmica entre la oferta y la demanda.
COEFICIENTE K:
Se aplica normalmente en estadística cuando se está "en medio de un gigantesco punto de inflexión de la historia de la veracidad mediática" manejada con esmero por los sectores económicos financiadores del medio difusor.
Esta es la contundente conclusión: desde la revolución neolítica, la oferta y la demanda es la que marca el valor de las cosas. No los medios de difusión.
En un mundo con una cada vez mayor población deseosa de adquirir bienes de consumo ¿qué tendrá más valor según la ley de la oferta y la demanda: una materia prima limitada o un papel moneda que un gobierno puede imprimir ilimitadamente? Pues eso, que las materias primas son la solución a que te devalúe los ahorros el político-banquero central de turno.
O sea que, gracias a Bernanke hay el triple de dólares circulando por el mundo ¿y todavía dice este iluminado que eso no ha influido en el precio de las materias primas? ridículo, perderán dinero en bolsa apostando contra los que están cambiando inútiles papelitos verdes por sólidas materias primas
Pues lamento decir que el tal Jeremy Grantham, o no sabe donde tiene la mano derecha, o está intentando deshacerse de todas sus posiciones largas en materias primas, para lo cual debe convencer al mayor número de personas posible de que van a continuar subiendo indefinidamente. Toda su argumentación es un gran disparate, mediocremente construido y pésimamente fundamentado.