La vicepresidenta segunda del Gobierno, Elena Salgado hizo esta consideración en la sesión de control al Gobierno en el Congreso, en respuesta a una pregunta del diputado del PP Cristóbal Montoro, que quiso saber su opinión sobre "el diagnóstico del Banco de España" de que "falta crédito bancario en este país", informa Europa Press.
El organismo supervisor "no prevé ningún estrangulamiento del crédito a familias y empresas", así que "o bien no se enteran ustedes de nada" o bien recurren a "distorsionar la realidad y desprestigiar todo lo que hace el Gobierno sin importarles crear alarma", dijo Salgado.
La vicepresidenta insistió en que el último informe de estabilidad financiera del Banco de España "pronostica un incremento del crédito", aunque moderado, ya que no se producirá "hasta que la economía no crezca" y no termine el desapalancamiento del sector de la construcción. Y esto último no es tarea fácil, dijo, "dado el punto de partida que tuvimos, que es la burbuja inmobiliaria y la cultura del ladrillo que ustedes cultivaron con tanta fruición". En opinión de Montoro, el Gobierno "tiene la responsabilidad de haber situado a España en el filo de la navaja de la falta de credibilidad internacional", que no se va a recuperar hasta que crezca la economía y haya crédito.
"Fíjese en los datos", pidió Salgado, que recordó que la financiación a sociedades no financieras y a familias se caracterizó en 2010 por una progresiva estabilización y cerró con un incremento del 0,7 % y ha comenzado 2011 creciendo.
Y si, además de eso "se separa el crédito al sector inmobiliario del resto de las actividades se ve un crecimiento más significativo", insistió Salgado, que añadió dirigiéndose a Montoro que "esos son los datos, y su pronóstico no se va a cumplir por mucho que usted lo intente".
Se da la circunstancia de que en las últimas semanas, los principales banqueros españoles han diagnosticado que la actividad crediticia seguirá cayendo este año, y en algún caso han ofrecido cifras concretas, como el consejero delegado del BBVA, Ángel Cano, que adelantó una caída del 5 %.
De la misma opinión fue el "número dos" del Santander, Alfredo Sáenz, que dijo que la concesión de créditos tiene que seguir cayendo para que empresas, familias y sector público reduzcan sus deudas en un 30 % del PIB, lo que podría demorarse hasta avanzado 2012. Por su parte, el director general corporativo del Banco Popular, Jacobo González-Robatto, consideró que España tiene que "apretarse el cinturón" por el excesivo nivel de endeudamiento de familias y empresas, y aseguró que la financiación y las hipotecas serán más caras que en el pasado.