Es la misma historia de siempre, Sr. Capella. Este engendro que tenemos como sistema político, llámese corporativismo o como se quiera -llamarlo socialismo tampoco afina totalmente-, ha conseguido algo increíble desde un punto de vista del marketing. Ha convencido al 99% de la población -tiro por lo bajo- de que vivimos en un sistema capitalista. Se le roba día tras día a la población en forma de impuestos, inflación, leyes que limitan la libertad, educación obligatoria, etc. y el pueblo pide más de lo mismo para poder "controlar al capitalismo", mientras los grandes beneficiados -políticos, sindicalistas, grandes corporaciones cercanas a lo público y vividores del cuento- siguen llenándose los bolsillos sin ofrecer nada a cambio. El miedo es que va todo a peor. Como Ud. dice, ni el Sr. Ovejero ni casi nadie parece entender que la ayuda a la fuerza es un robo.
Claro, sigue desviando la culpa de la crisis al estado de bienestar. Ya que nos lo vamos a creer. ¿Dónde estará todo ese proceso de venderse unos a otros las hipotecas (subprime y etc) y producir un dinero que era ni sé cuántas veces superior al realmente generado por los bienes y servicios producidos ...