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¿Por qué necesitamos bebés?

El principal límite al desarrollo de la civilización es una población estancada, pues imposibilita continuar el proceso de profundización y especialización del conocimiento práctico que es necesario para el desarrollo económico.

alcait2 dijo el día 21 de Julio de 2010 a las 20:34:

con el 41% de paro juvenil este país necesita un revolcon social e ideológico , el socialismo nos ha destrozado pero quiere aun mas derrotar a España

Nearco dijo el día 21 de Julio de 2010 a las 18:23:

"el desarrollo económico hace posible mantener volúmenes crecientes de población"

sobre el papel sí, pero la realidad es exactamente la contraria, el grado de desarrollo y la natalidad están relacionados de manera inversamente proporcional.

pablocj dijo el día 21 de Julio de 2010 a las 15:31:

Está muy bien eso de tener hijos, pero cuánto cuesta mantener un hijo y criarlo? A día de hoy las únicas personas que pueden tener hijos son los matrimonios de 40-50 años que ya tienen la vida casi resuelta, pues de 35 años para abajo la mayoría vivimos mantenidos por nuestros padres, puesto que no hay trabajo y a lo máximo que aspiramos es a un contrato de prácticas que nos dé para costearnos las vacaciones con los amigos. Esa es la realidad. No sólo hace falta gente joven, falta gente joven con trabajo. 9 millones de jóvenes en paro siguen siendo inútiles.

atandoca dijo el día 21 de Julio de 2010 a las 14:27:

Está complicado tener hijos cuando trabajan los dos y la hipoteca se paga en cuarenta años y si le sumamos el hecho de que esta sociedad solo crea egoístas a los que less venden que el sacrificio es de primos. Por otro lado para formar una familia al igual que para crear una empresa, hace falta ilusión y creer un poco en el futuro y el que les regalamos a los jóvenes es una birria.

Como lo cortés no quita lo valiente, buen artículo, he aprendido mucho con él.

loboe dijo el día 21 de Julio de 2010 a las 09:53:

Creo que la frase que abre el artículo "Que en España falten 9 millones de jóvenes para que exista relevo generacional" esconde una doble realidad y que el Sr. Llama las mezcla y las confunde, cuando en realidad, son elementos disjuntos.

Parecería deducirse del artículo que el progreso humano exige un crecimiento constante de la población, o al menos un mantenimiento de la misma para garantizar el denominado "relevo generacional", aunque no existe ninguna evidencia de que esto tenga que ser así, más allá de la mera sustitución de un individuo por otro.

La Revolución Industrial ya nos enseñó que la tecnología permite fabricar más bienes más barato para más gente y que el progreso no tiene nada que ver con la población -En su caso, India o China serían primeras potencias mundiales desde hace tiempo-. Además, en el ambiente empresarial es de sobra conocida la frase "la gente para la guerra", en referencia de que los buenos negocios suelen caracterizarse por necesitar poca mano de obra.

Desde el punto de vista de la productividad, la falta de relevo generacional no tendría demasiada importancia si los puestos que no se renuevan fuesen los de la infinita caterva de parásitos que pueblan nuestro sistema del bienestar -sobre todo el de los zánganos-. Por otra parte, si menos pudieran producir más eficazmente, tampoco tendría porqué disminuir la calidad de vida del conjunto. Por poner un ejemplo, podríamos considerar la proporción de población activa involucrada en la producción del pan que comemos cada día frente a la que se dedicaba al mismo fin hace unas décadas.

En el caso de que esa menor fuerza productiva no fuese suficiente para proporcionar a las clases pasivas la calidad de vida que ellos -nosotros- esperamos, creo que tendrían bastante razón si aplicaran algún tipo de desobediencia civil ante la perspectiva de vivir como esclavos para mantener a tamaña población improductiva.

Ya se que suena duro, pero no olvidemos que no podremos culparlos del descenso poblacional. Ya hemos quedado en anteriores artículos en que del descenso de natalidad solo podemos culparnos nosotros mismo. Además, las generaciones futuras ya tendrán bastante con pagar las facturas que les dejará Zapatero y al fin y al cabo, lo de renunciar a la herencia, cuando el debe es mayor que el haber también está inventado desde hace tiempo.

Ya manifesté en un comentario anterior que me parece bien que las parejas de hoy prefieran vivir la vida antes que afrontar la pesadísima carga de criar hijos. Pero pretender que nuestra vejez la sufraguen los hijos ajenos, me parece el colmo de la cara dura.

paserifo dijo el día 21 de Julio de 2010 a las 03:50:

Mira, Manolo. Teniendo en cuenta cómo esta Estepaís y el futuro que se avecina, el aborto más que una aberración parece un acto de genuina compasión y santa piedad.

Hace muchos siglos, cuentan que nos invadieron los musulmanes aprovechándose del caos político y moral de la época. Hoy, al caos político y moral, se suman otros factores no menos importantes, el suicidio obligatorio que supone las facilidades para abortar, las dificultades para iniciar y conservar una familia, la persecución a las tradiciones buenas, el terrorismo lingüístico y alguna otra cosa. Somos una ganga. Si no nos invaden ahora, nunca recuperarán Al-ándalus.

rawolf dijo el día 20 de Julio de 2010 a las 23:25:

Leeros en Cotizalia el artículo de J.M. de la Viña, podréis disfrutar del enfoque malthusiano, aderezado con fórmulas matemáticas sin el menor sentido económico.

Un recuerdo para Julian Simon (el que le ganó, creo que en los 80, una apuesta hecha 10 años antes a Erhlich, otro profeta del fin del mundo de aquella época).