Muy bueno, Rallo.
Una visión económica clarísima, y lo de "el frío de ahí fuera" me ha encantado.
Lo clavas.
A la par que leerlo me revuelve más las tripas.
Esperanza: mándalos a la calle.
Esta frase es fuerte:
"...Una tropa de privilegiados se acoja a la prebenda del derecho de huelga para protestar contra una rebaja del 5% de sus salarios destinada a evitar que quiebre la compañía que los contrata..."
¿Desde cuándo es un privilegiado un trabajador del metro? ¿Cuánto cobra para que se le considere como tal? ¿En qué consisten sus envidiables condiciones laborales?
¿La compañía que los contrata está demostrado que quiebra por sus elevados salarios? ¿Por sus reducidas jornadas?
¿Un derecho es una prebenda o un derecho? Porque no me ha quedado claro, y diría que no puede ser ambas cosas a la vez.
¿Son ellos responsables de que el sector público esté hipertrofiado?
¿Qué responsabilidad tiene los políticos en todo esto? Porque yo juraría que los que han creado ua maquinaria pública brutal y bastante inoperante en general, han sido ellos.
¿Por qué no empezamos por eliminar cargos políticos a mansalva? Que sobran miles, y ellos sí tiene condiciones de trabajo y salarios realmente privilegiados.
Si tenemos tantos parados en España, la culpa no es de los trabajadores, sino de los gestores, que no saben hacer bien su trabajo.
¿No le parece legítimo que un colectivo defienda sus derechos? ¿No cree que cualquiera que lo haga perjudicará a los demás ciudadanos de una forma u otra?
¿Hemos de acatar sin rechistar lo que nos imponen unos gobernantes incompetentes y mediocres sólo porque nos molesta un día de cacao en Madrid?
Espero caballero, que nunca recorten de tal modo sus derechos que tenga que ir usted a una huelga, pero si algún día lo hacen, recuerde todo lo que ha escrito hoy, y cuente con mi apoyo, al igual que se lo doy a todos aquellos que luchen por defender lo poco que tienen, que cada vez son menos en este país adormecido.
Cuando me levanto, a veces no sé si estoy en España o en una república bananera cualquiera, así que reconozco que las huelgas me resultan incluso refrescantes aunque me generen incomodidad, porque mantienen mi esperanza de que las cosas se pueden cambiar.
Pues así son la gran mayoría de esos 3,3 millones de empleados públicos.
¿El gobierno no se estará frotando las manos y felicitando a estos energúmenos que tienen trabajo, cuando cinco millones de españoles pueden ocupar su puesto?
Que reviente Madred, es como un grito de guerra declarada que es de esperar consiga la expulsión de los que no han cumplido los servicios mínimos, y que si son expulsados verán qué bien están dirigidos por politicastros que solo odian a los que dicen proteger.
¿Todos debemos ayudar y a ellos no se les puede tocar?
Es una canallada que merece la expulsión y la actuación de la Fiscalia, claro, obedecen... y no quieren perder la inmunidad y las alabanzas de la izquierda que nos lleva a un ambiente pre bélico mediant¡te la ruina total.
¡A REVENTAR!
Pues puede ser que revienten...a Esperanza no le tiembla la mano.
A la calle unos y a la cárcel los demás (los que hayan cometido delitos). Y despues a privatizar el metro.