Saludos
La democracia con sufragio universal es un riesgo que países como España no se pueden permitir, y Zapatero, el socialismo y los nacionalismos periféricos son la prueba evidente.
Si el voto fuese exclusivamente para los de su rango académico mejor negociados estaríamos, sin duda. La masa formando gobiernos es un disparate, pese a quien le pese. ¿Y por qué digo esto? Por dos motivos: el discurso de los políticos reduciría su demagogia por los destinatarios a los cuales va dirigido y la calidad del voto de los intensamente instruidos debiera propender a un mejor gobierno que el dimanado de la masa.
Y esa es la razón profunda de los disparates en España, por eso no debemos sorprendernos de nada, es la masa, el lumpen proletariado quien ha determinado el presidente del gobierno.
Y un mañana no muy lejano. El nuevo Dios ZParo parirá una Ley que regulará nuestra vida terrenal y celestial, si antes no ha sido acogido por el altísimo, que me temo que no le querría ni en pintura. Ya lo dijo Sebas a los trabajadores de Garoña: no os olvidaremos. RIP.
Sí. Todo eso es cierto. Pero no es menos cierto que, a la vista de lo que había hecho el PSOE en materia energética, cabía esperar eso ¡y más!
Y una buena parte de responsabilidad en esto la tiene el Partido P'ayudar. Y la tiene desde la época de Aznar, que NO HIZO ABSOLUTAMENTE NADA PARA CORREGIR LOS DESMANES SOCIALISTAS EN DIFERENTES CAMPOS, ENSEÑANZA Y ENERGÍA ENTRE OTROS.
Felipe González, sólo o en connivencia -Lemóniz mediante- con ETA, decidió paralizar la construcción de centrales nucleares que, como las de Valdecaballeros (2 reactores) estaban ya en avanzado estado de construcción. Estableció lo que eufemísticamente se llamó moratoria nuclear
-¿Qué hizo Aznar al llegar al gobierno en 1996? -¡NADA!
No tenía mayoría absoluta para hacerlo, dirán.
-Bien. Pero ¿qué hizo en 2000 con mayoría absoluta?
-ABSOLUTAMENTE NADA!
Podía muy bien haber levantado esa moratoria obtenida con el concurso inestimable de los terroristas, que luego han hecho suya los socialistas como seña de identidad, junto a los comunistas huérfanos de líder -léase ecolojetas- al que aferrarse para justificar la mamandurria que tienen del Estado.
Tampoco hicieron nada, ni Aznar, ni Felipe González, cuando tuvieron mayoría absoluta, para poner a los nacionalistas y a los ecolojetas en su verdadero sitio. En las Cortes Generales no debe tener escaño quien no represente, al menos, al 5% de los españoles censados como electores.
Y, claro, de aquellos polvos -que empezaron en la misma transición, transigiendo más de lo debido a las izquierdas y a los nacionalistas- viene estos lodos. Y, ¡ojo! que el lodo puede ahogar al personal.