¿Política económica? Esperpento y desprecio por los andaluces que observamos atónitos cómo nuestro dinero en las cajas no sólo no es respetado, sino que puede ser seriamente maltratado sin que podamos hacer nada.
santelmo dijo el día 3 de Marzo de 2009 a las 01:55:
Muy inteligente su artículo, sí señor. Porque lo que casi nadie sabe es que Chaves es en esta ocasión un gran perdedor, ya que la Caja única andaluza, proyecto favorito de Chaves, se ha quedado en el desván para mejor ocasión a causa de la llamada telefónica de Pepiño Blanco, quien ordenó al presidente de la Junta de Andalucía que preste su consentimiento a la absorción por Unicaja de la Caja de Ahorros de Castilla-La Mancha en situación de crash técnico.
A pesar de lo que pueda parecer a la gente que no está en la película, Chaves no gana poder, sino que lo pierde (y con él, todo el PSOE andaluz) ya que por ser la nueva Caja interterritorial, estará bajo la supervisión del Banco de España, que avalará la operación con 2000 millones de euros (ampliables en función de las circunstancias) y 1.500 millones de desgravaciones fiscales en cinco años. Con estas inyecciones extraordinarias, el Banco de España, que ha actuado de alcahueta en el forzado matrimonio de conveniencia para los intereses generales del PSOE, facilitará a Unicaja la pesada digestión de la CCM. Frente a los políticos de ambos partidos, aquí el único que gana poder es Braulio Medel, el Presidente de Unicaja, que ha demostrado con creces su extraordinaria profesionalidad librando a su Entidad de la basura inmobiliaria, a pesar de estar radicada en la Costa del Sol, zona en la que la borrachera constructiva y crediticia ha sido crónica desde hace décadas. Su gestión ha salvado la solvencia de Unicaja, a pesar de todos los pesares, colocando a su Presidente en una posición tan fuerte que lo convierte en imprescindible para pilotar, con la aquiescencia tanto del PSOE como del PP, el nuevo proceso de integración interregional.
Muy inteligente su artículo, sí señor. Porque lo que casi nadie sabe es que Chaves es en esta ocasión un gran perdedor, ya que la Caja única andaluza, proyecto favorito de Chaves, se ha quedado en el desván para mejor ocasión a causa de la llamada telefónica de Pepiño Blanco, quien ordenó al presidente de la Junta de Andalucía que preste su consentimiento a la absorción por Unicaja de la Caja de Ahorros de Castilla-La Mancha en situación de crash técnico.
A pesar de lo que pueda parecer a la gente que no está en la película, Chaves no gana poder, sino que lo pierde (y con él, todo el PSOE andaluz) ya que por ser la nueva Caja interterritorial, estará bajo la supervisión del Banco de España, que avalará la operación con 2000 millones de euros (ampliables en función de las circunstancias) y 1.500 millones de desgravaciones fiscales en cinco años. Con estas inyecciones extraordinarias, el Banco de España, que ha actuado de alcahueta en el forzado matrimonio de conveniencia para los intereses generales del PSOE, facilitará a Unicaja la pesada digestión de la CCM. Frente a los políticos de ambos partidos, aquí el único que gana poder es Braulio Medel, el Presidente de Unicaja, que ha demostrado con creces su extraordinaria profesionalidad librando a su Entidad de la basura inmobiliaria, a pesar de estar radicada en la Costa del Sol, zona en la que la borrachera constructiva y crediticia ha sido crónica desde hace décadas. Su gestión ha salvado la solvencia de Unicaja, a pesar de todos los pesares, colocando a su Presidente en una posición tan fuerte que lo convierte en imprescindible para pilotar, con la aquiescencia tanto del PSOE como del PP, el nuevo proceso de integración interregional.