LD (EFE) Según fuentes jurídicas, Leis, que compareció durante algo menos de una hora en calidad de imputada, aseguró que ella se limitaba a poner las cantidades que le decían en los cheques y a partir de ahí ya no era su responsabilidad.
En su declaración del pasado 14 de febrero, Leis reconoció haber emitido cheques por un importe global de 2.500 millones de pesetas, que fueron firmados por el propietario de la agencia, Antonio Camacho, y los apoderados, Javier Sierra de la Flor y José María Ruiz de la Serna. Esta y otras afirmaciones llevaron a la juez Palacios a suspender la declaración y convocar una nueva, que se ha producido este miércoles, para que Leis acudiera como imputada y con un abogado, ya que su actuación podría desembocar en una acusación como "cooperadora necesaria".
La mayor parte de los cheques, según el relato de Leis, fueron cobrados en la sucursal de La Caixa de Majadahonda (Madrid) por el chófer de Camacho o por algún empleado de la agencia, que entregaba a la propia contable el dinero en efectivo para que lo custodiara en la caja fuerte. Estas cuantías, añadió Leis en su declaración, se utilizaron, entre otras cosas, para reintegrar sus inversiones a los clientes cuando la agencia no contaba con saldo suficiente.
Según fuentes judiciales, no será hasta la próxima semana, cuando el Ministerio Fiscal haya analizado el contenido de las declaraciones de Leis, cuando tome una decisión sobre la petición de determinadas medidas cautelares para la contable.
En su declaración del pasado 14 de febrero, Leis reconoció haber emitido cheques por un importe global de 2.500 millones de pesetas, que fueron firmados por el propietario de la agencia, Antonio Camacho, y los apoderados, Javier Sierra de la Flor y José María Ruiz de la Serna. Esta y otras afirmaciones llevaron a la juez Palacios a suspender la declaración y convocar una nueva, que se ha producido este miércoles, para que Leis acudiera como imputada y con un abogado, ya que su actuación podría desembocar en una acusación como "cooperadora necesaria".
La mayor parte de los cheques, según el relato de Leis, fueron cobrados en la sucursal de La Caixa de Majadahonda (Madrid) por el chófer de Camacho o por algún empleado de la agencia, que entregaba a la propia contable el dinero en efectivo para que lo custodiara en la caja fuerte. Estas cuantías, añadió Leis en su declaración, se utilizaron, entre otras cosas, para reintegrar sus inversiones a los clientes cuando la agencia no contaba con saldo suficiente.
Según fuentes judiciales, no será hasta la próxima semana, cuando el Ministerio Fiscal haya analizado el contenido de las declaraciones de Leis, cuando tome una decisión sobre la petición de determinadas medidas cautelares para la contable.
