L.D. / EFE.- Jesús Caldera ha hecho estas declaraciones a propósito del discurso pronunciado el pasado miércoles por José María Aznar, en la localidad vallisoletana de Quintanilla de Onésimo, cuando el presidente anunció que el Gobierno continuaría su proceso privatizador.
El portavoz socialista ha asegurado que "el “caso Gescatera” se quedará en una simple anécdota cuando el Parlamento pueda investigar el proceso de privatización de las empresas públicas con el Gobierno de Aznar, cinco billones de pesetas que no han tenido ningún control parlamentario". Además, Caldera ha instado al Ejecutivo a explicar la dimisión del anterior presidente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Pedro Ferreras.
Por su parte, el ministro portavoz del Gobierno, Pío Cabanillas, ha subrayado la intención del Ejecutivo de que "el peso de la Ley caiga sobre quienes sean responsables de cualquier actuación delictiva" en relación a la "estafa financiera" de Gescartera. En la conferencia de prensa al término de la primera reunión del Consejo de Ministros, Cabanillas ha asegurado que "no hay nada descartable" y que "cualquier medida o actuación que favorezca la eficacia en el control siempre será digna de tratamiento y consideración".
Tras subrayar el interés del Gobierno por aclarar esta trama, Cabanillas apuntó que "mientras que algunos dilatan durante un tiempo -incluso años- comisiones de investigación, nosotros las ponemos en marcha; mientras unos hablan de maquinaciones o conspiraciones políticas, nosotros ni negamos los hechos ni dejamos de aclararlos ante la opinión pública, y mientras unos ponen la mano en el fuego, nosotros ponemos manos a la obra por la transparencia".
Finalmente, y en respuesta a los reproches de los socialistas, Cabanillas ha asegurado que duda de que "a través de la crítica fácil, de la invectiva y del desvarío o incluso de algunos insultos" se pueda "echar la luz que nosotros sí vamos a dar a este".
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El portavoz socialista ha asegurado que "el “caso Gescatera” se quedará en una simple anécdota cuando el Parlamento pueda investigar el proceso de privatización de las empresas públicas con el Gobierno de Aznar, cinco billones de pesetas que no han tenido ningún control parlamentario". Además, Caldera ha instado al Ejecutivo a explicar la dimisión del anterior presidente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Pedro Ferreras.
Por su parte, el ministro portavoz del Gobierno, Pío Cabanillas, ha subrayado la intención del Ejecutivo de que "el peso de la Ley caiga sobre quienes sean responsables de cualquier actuación delictiva" en relación a la "estafa financiera" de Gescartera. En la conferencia de prensa al término de la primera reunión del Consejo de Ministros, Cabanillas ha asegurado que "no hay nada descartable" y que "cualquier medida o actuación que favorezca la eficacia en el control siempre será digna de tratamiento y consideración".
Tras subrayar el interés del Gobierno por aclarar esta trama, Cabanillas apuntó que "mientras que algunos dilatan durante un tiempo -incluso años- comisiones de investigación, nosotros las ponemos en marcha; mientras unos hablan de maquinaciones o conspiraciones políticas, nosotros ni negamos los hechos ni dejamos de aclararlos ante la opinión pública, y mientras unos ponen la mano en el fuego, nosotros ponemos manos a la obra por la transparencia".
Finalmente, y en respuesta a los reproches de los socialistas, Cabanillas ha asegurado que duda de que "a través de la crítica fácil, de la invectiva y del desvarío o incluso de algunos insultos" se pueda "echar la luz que nosotros sí vamos a dar a este".