Continúa la deriva del PSOE hacia posiciones características de la extrema izquierda. Esta semana, el nuevo secretario de organización de Ferraz, José Luis Ábalos, afirmó en rueda de prensa que la formación del puño y la rosa votará contra el techo de gasto propuesto por la Administración Rajoy "porque obedece a una ideología neoliberal que pretende reducir el Estado social a lo mínimo".
Resulta llamativo que el PSOE adopte una posición así. De entrada, el principal motivo para rechazar la posición de los socialistas radica en la mera lógica matemática. Aunque España tiene uno de los datos de déficit público más elevados de las grandes economías del mundo, el Gobierno viene de proponer un techo de gasto que eleva el gasto no financiero del Presupuesto del Estado hasta los 119.834 millones de euros. Lejos de "reducir el Estado social a lo mínimo", como denuncia Ábalos, esto supone incrementar el gasto en un 1,3%. ¡Curiosa reducción!
No está de más recordar que, de acuerdo con la documentación del ministerio de Hacienda, el año 2018 se saldará con un desfase presupuestario del 2,2% del PIB, que equivale a gastar por encima de lo ingresado en más de 20.000 millones. Semejante déficit público significará que la deuda de las Administraciones seguirá rondando el 100 por cien del PIB (para ser exactos, Montoro espera un 97,6 por ciento en 2018). Por tanto, si de algo peca el gobierno de Mariano Rajoy es de elevar el techo de gasto en un 1,3% a pesar de que el déficit seguirá siendo superior a los 20.000 millones y de que la deuda seguirá rondando el 100% del PIB. Pero, más allá de esta valoración, el mero hecho de que el techo de gasto aumente en 2018 desmonta que el Gobierno esté siguiendo, como afirma el PSOE, una "ideología neoliberal" orientada a "reducir el Estado social a lo mínimo".
Un vistazo al panorama internacional
En mi libro Por qué soy liberal(Ediciones Deusto) he dedicado un capítulo al creciente peso de las reglas fiscales en los países desarrollados. Como muestro en la siguiente gráfica, el 40% de los países de la OCDE aplica ya un techo de gasto para limitar la evolución del gasto público, frente a la práctica inexistencia de este tipo de normativas en la década de 1980.
No solo han ido a más las reglas que limitan el gasto, sino que también se observa una corriente al alza en las reglas de equilibrio presupuestario (casi toda la OCDE ha aprobado normas de este tipo) y en las normas que limitan la deuda (también muy generalizadas en las economías desarrolladas).
El techo de gasto y la reforma constitucional
Para colmo, conviene recordar que fue un gobierno del PSOE el que optó por aprobar una reforma del artículo 135 de la Constitución Española, mediante el cual se introdujo al máximo nivel normativo del ordenamiento jurídico la obligación de desarrollar reglas fiscales que limiten el déficit y la deuda.
En consecuencia, el Gobierno del PP planteó la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera, publicada en el BOE el 30 de abril de 2012. Aunque el PSOE no respaldó dicha Ley, el desacuerdo entre el partido de gobierno y Ferraz quedó restringido a una cuestión menor (para el PP, el límite de déficit estructural a partir de 2020 debía ser del 0% del PIB, mientras que el PSOE defendía un 0,4%, apenas cuatro décimas más).