Madrid recoge los frutos de la recuperación del sector inmobiliario. La capital atrae el interés tanto de los grandes como de los pequeños inversores, que ven en el sector del ladrillo una oportunidad de oro para rentabilizar su capital.
Con la llegada de las nuevas tecnologías y el cierre del grifo del crédito por parte de la banca tradicional, han surgido en España nuevas alternativas de financiación que están cosechando muy buenos resultados.
Una de ellas es el crowdfunding inmobiliario. Se trata de un sistema que permite a un gran número de compradores adquirir una vivienda entre todos aportando pequeñas cantidades de dinero. Housers es pionera en nuestro país, y la primera plataforma de inversión inmobiliaria autorizada por la CNMV. Esta compañía ofrece a sus usuarios la posibilidad de invertir en viviendas situadas en las principales ciudades de España aportando desde 50 euros. Una vez efectuada la operación, los inversores recibirán un dividendo mensual por su puesta en alquiler y su posterior venta.
La propia plataforma se encarga de escoger las viviendas listas para vender y de repartir los beneficios con sus clientes. Para acceder a su catálogo, los interesados solo tienen que registrarse en la plataforma de forma gratuita y sin ningún compromiso.
Dos proyectos en Madrid
Una de las últimas viviendas que ha pasado a formar parte de su catálogo está situada en el distrito de Salamanca. El piso, de 64 m², se encuentra en la calle Antonio Toledano, a escasos metros de la Plaza Manuel Becerra.
La idea de la operación es comprar la vivienda, reformarla por completo y venderla a los 12 meses. La rentabilidad total estimada en ese plazo es del 6,50%. El piso tiene tres habitaciones, dos baños y un salón con cocina integrada. Para llevar a cabo el objetivo se requiere un total de 239.000 euros.
Otro de los proyectos abiertos también está en el distrito de Salamanca. Consiste en conceder un préstamo a tipo fijo a un promotor inmobiliario para la construcción de cuatro viviendas en la calle de los Peñascales. La zona es perfecta para invertir porque además de la alta demanda existente, no existe promoción nueva en el barrio. Las viviendas que hay tienen una antigüedad entre los 20 y 50 años.
En este tipo de oportunidad no es necesario esperar a la venta de las viviendas, ya que los usuarios comenzarán a obtener ingresos desde el primer mes hasta que el promotor amortice todo el préstamo. El interés pactado con el promotor es del 8% + 2%, lo que supone un 10% en sólo 12 meses.
La superficie total es de 290 m2 que serán repartidos en un dúplex, dos pisos de dos dormitorios y un ático. La operación consiste en comprar el solar, demoler la edificación existente, comercializar los inmuebles sobre plano en julio, construir las viviendas y entregarlas. Un total de 800.000 euros serán necesarios para hacerse con este producto único y de alta rentabilidad.
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