Foro Regulación Inteligente acaba de publicar Estado Niñera, un ranking elaborado en el marco de la red EPICENTER que mide la facilidad que brindan los reguladores europeos a la hora de comer, beber y fumar sin trabas. España aparece en la zona media-baja, lo que implica que el grado de intervencionismo en nuestro país es limitado, si bien la tendencia en los últimos años ha sido negativa.
Pero el informe va más allá y, además de calificar a los países, contrasta los distintos niveles de intervencionismo con los resultados socio-sanitarios de los distintos países de la Unión Europea. De entrada, como vemos en el primer gráfico del informe, no se aprecia correlación alguna entre un Estado Niñera más activo y una mayor esperanza de vida. De hecho, algunos de los países europeos que tienen más esperanza de vida están en la zona media-baja del índice.
De las tres categorías evaluadas, la del tabaco es la que está sujeta a más restricciones. No obstante, el segundo gráfico del informe apunta que la tasa de consumo tampoco guarda relación con el nivel de restricciones vigente. Una vez más, el "Estado Niñera" queda en evidencia.
El tercer gráfico mide el consumo de alcohol y, una vez más, arroja un escenario disperso, en el que imponer más restricciones regulatorias o fiscales no va necesariamente de la mano con niveles más reducidos de ventas de este tipo de bebidas.
De hecho, si nos ceñimos simplemente al porcentaje de población con problemas de alcoholismo, vemos una vez más que no hay una correlación entre más intervencionismo regulatorio y menores niveles de incidencia.
Lo que sí refleja el informe es que un PIB per cápita más alto va de la mano de niveles más elevados de esperanza de vida.