Después de más de 60 años de actividad, la cadena de cafeterías Nebraska echó el cierre el pasado mes de enero a sus cinco establecimientos de Madrid. Corpfin Capital Real Estate había comprado la sociedad de restauración, y aseguraba que su continuidad era inviable.
Los locales situados en el centro de la capital fueron adquiridos por la gestora de inversión y gestión inmobiliaria en diciembre. La excepción fue el local de Tetuán, que era el único que Nebraska tenía en régimen de alquiler y que ha sido reabierto por dos antiguos empleados de la cadena.
Este grupo inmobiliario se dedica a la compra y remodelación de locales en zonas céntricas para alquilarlos posteriormente y, según ha publicado el diario El Economista, ya tiene inquilino para la antigua cafetería de Alcalá. Sería la cadena de comida rápida McDonald's el nuevo ocupante de este establecimiento.
El local tiene 400 metros cuadrados, distribuidos entre la planta baja y un pequeño sótano. La cadena de hamburgueserías pretende inaugurarlo "antes de que termine el año, pero de momento están pendientes de las licencias para poder adecuar el establecimiento a su imagen de marca".