El último anuncio de inversiones públicas en Cataluña que protagonizó este martes el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, fue recibido con el habitual escepticismo y desdén del que, últimamente, hacen gala los nacionalistas. No en vano, los 4.200 millones de euros comprometidos por el Estado para la ejecución de obra pública e infraestructuras de diversa índole hasta 2020 tiene como objetivo contrarrestar el habitual discurso victimista que ha usado el movimiento separatista en los últimos años, bajo el eslogan de "España nos roba", para construir y justificar su discurso.
La frialdad de los datos, sin embargo, muestra una realidad muy diferente, ya que Cataluña ha sido, de lejos, la comunidad que ha recibido más dinero del Gobierno del PP desde 2012 y la que, además, podría salir más beneficiada de las posibles quitas sobre la deuda regional que están negociando populares y socialistas de cara a la futura reforma del sistema de financiación autonómica.
Infraestructuras: 15.400 millones
En primer lugar, a los 4.200 millones de euros en inversiones hasta 2020 anunciados por Rajoy, hay que sumar otros 11.165 millones que el Grupo Fomento -Ministerio y sus empresas- han destinado a Cataluña entre 2012 y 2016. En total, por tanto, el Gobierno del PP habría comprometido un total de 15.400 millones de euros en la región para la construcción, ampliación y mejora de infraestructuras -carreteras, puertos, aeropuertos y ferrocarril, entre otras actuaciones-.
De hecho, si se amplía un poco más la perspectiva temporal, se observa que Cataluña ha sido la gran beneficiada en cuanto a la inversión territorial en infraestructuras. Según un estudio elaborado por Convivencia Cívica Catalana, el Ministerio de Fomento adjudicó obra pública en España por un importe total de 51.273 millones de euros entre 2006 y 2015, siendo Cataluña la autonomía más mas favorecida, con 8.283 millones de euros, el 17,8% del total adjudicado. Le siguen a continuación Andalucía, con el 17% y a mayor distancia Galicia (12,7%), Castilla y León (12,1%), la Comunidad Valenciana (9%) y la Comunidad de Madrid (5,4%).
Asimismo, según el citado informe, en ningún año de la última década Madrid ha recibido más obra pública que Cataluña y, en el cómputo global de 2006 a 2015, la obra pública adjudicada por Fomento en Cataluña (8.283 millones) triplica a la de Madrid (2.514 millones), desmontando así la tesis del supuesto agravio inversor que tanto denuncian los nacionalistas.
Liquidez y rescate: 66.550 millones de euros
En segundo lugar, Cataluña también ha sido la más beneficiada por los mecanismos de liquidez y financiación extraordinaria que ha aplicado el Ejecutivo desde 2012, como el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), el fondo de pago a proveedores o anticipos a cuenta del sistema de financiación, entre otros.
Así, del total de 217.000 millones de euros inyectados por el Estado al conjunto de las CCAA para financiar sus déficit, amortizar sus vencimientos de deudas y garantizar el funcionamiento de los servicios públicos básicos, evitando con ello su quiebra, Cataluña es la región que ha recibido una mayor cuantía (66.550 millones de euros), muy por delante de la Comunidad Valenciana (50.456) o Andalucía (32.954 millones).
Fruto de esos adelantos de financiación y créditos extraordinarios, más de la mitad de la deuda autonómica está yo en manos del Estado, lo cual equivale a unos 138.000 millones de euros. Cataluña es la región más endeudada de España en términos absolutos, con cerca de 74.400 millones, y también la que debe más dinero al Estado debido a los préstamos del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA): 46.700 millones de euros, el 63% de la deuda pública catalana. Así pues, si, finalmente, el Gobierno opta por aplicar quitas a las CCAA, Cataluña, posiblemente, será también una de las más beneficiadas por dicha condonación, cuya factura recaería sobre todos los contribuyentes españoles.
Y ello, a pesar de ser una de las regiones más incumplidoras con los objetivos de déficit marcados por el Ministerio de Hacienda. En 2015, último ejercicio cerrado, el déficit catalán se situó en el 2,9% de su PIB, cuatro veces más que el límite del 0,7% establecido, protagonizando el mayor descuadre fiscal de las CCAA. Curiosamente, su déficit público, lejos de reducirse, es hoy superior al del 2012 (2,27%).
En total, entre inversiones públicas (15.400 millones) y rescates (66.550), el Gobierno de Mariano Rajoy ha inyectado o comprometido casi 82.000 millones de euros desde el inicio del proceso separatista.