El distinguido periodista canario Antonio Salazar llamó mi atención hacia una interesante entrevista al profesor y político César Rodríguez Placeres.
Preguntado por el principal problema dentro y fuera de Canarias, responde:
La falta de formación y la desigualdad. No leer a Marx. O a Vicenç Navarro, al menos. Antes los jóvenes hacían la revolución. Ahora juegan al Pokémon Go.
De entrada, como ha demostrado el economista catalán Xavier Sala-i-Martín, la desigualdad en el mundo ha caído muy marcadamente, por el enriquecimiento relativo de numerosos países pobres, en especial los más poblados: China e India. Los indicadores educativos, empezando por el analfabetismo, han mejorado en las últimas décadas en el planeta. Se discute mucho sobre la calidad de la educación, y está bien hacerlo, pero no parece acertado afirmar que la formación ha empeorado.
Tampoco parece que Marx o Navarro se hayan quedado sin lectores. Sigue habiendo comunistas admiradores del pensador alemán. El propio comunismo, tras un siglo y decenas de millones de trabajadores muertos, goza de una excelente salud, como lo demuestra el hecho de que aún tiene seguidores.
El profesor español, por su parte, es un hombre de gran predicamento e influencia, como lo prueba el que haya recibido un doctorado en la elitista Universidad Johns Hopkins de Estados Unidos, donde además enseñó durante 35 años. En la actualidad es catedrático en la prestigiosa Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, y publica con regularidad en los medios de izquierdas, donde es leído y celebrado. Vamos, que de marginado, nada de nada. Sus razonamientos no han sido generalmente cuestionados, con alguna excepción, como es mi caso, en estas mismas páginas; puede verse el blog http://www.carlosrodriguezbraun.com/.
Más preocupante es el diagnóstico del profesor Rodríguez Placeres sobre la revolución. En primer lugar, porque la revolución nunca fue hecha por "los jóvenes", sino por una minoría elitista de ellos. Y, en segundo lugar, dado el resultado brutal y genocida de las revoluciones, pues casi mejor habría sido que los jóvenes Lenin, Mao, Pol Pot y compañía se hubieran dedicado, efectivamente, a jugar al Pokémon Go, o a cualquier cosa, en vez de emprender las terribles matanzas que perpetraron contra sus respectivos súbditos.
Esto no parece preocuparle al profesor, que afirma que hoy estamos peor que bajo la dictadura franquista: "Porque no ha habido democracia y va ganando el sistema capitalista". Lo primero parece falso, porque hay más democracia que nunca antes; y lo segundo parece bastante dudoso, porque si el capitalismo tiene que ver con la propiedad privada y los contratos voluntarios, la enorme expansión de los Estados en el último medio siglo sugiere que lo que va ganando no es el capitalismo sino una combinación de capitalismo y socialismo, o de mercado y Estado, o de libertad y coacción.
Pero nada de esto arredra al profesor Rodríguez Placeres, que declara: "Sueño con una sociedad igualitaria, con la riqueza limitada a 4,8 millones. Más es explotación". Esta es una teoría muy notable que, por desgracia, no elaboró.