El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, confirmó el lunes que el Gobierno elevará el Impuesto de Sociedades mediante la eliminación de deducciones y también subirá los Impuestos Especiales, entre los que podrían encontrarse los carburantes, el alcohol, el tabaco. Pero no serán los únicos.
El Gobierno también baraja implantar la denominadaeuroviñeta, una tasa por circular a los vehículos pesados de más de 3,5 toneladas. La Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM) ya ha advertido de que su aplicación encarecerá el precio final de todos los productos y "lastraría" el consumo.
Las empresas del transporte se muestran "convencidas" de que la aplicación de la "euroviñeta" comportaría "efectos perjudiciales inmediatos" en la competitividad de toda la economía española. Subrayan, asimismo, que "dificultaría enormemente" la exportación de los productos españoles como consecuencia de la "situación periférica".
Asimismo, el PP estudia crear un nuevo impuesto sobre las bebidas azucaradas, a imagen y semejanza de lo pretende hacer la Generalidad de Cataluña, y cuyo tipo podría rondar el 20%. Por último, y a la espera de que el Gobierno vaya perfilando otras posibles subidas de impuestos, se da por hecho que mantendrá el Impuesto de Patrimonio, un tributo que se aplica sobre bienes que ya han sido gravados y que, si bien se suprimió en 2008, fue recuperado en 2011 de forma temporal para elevar la recaudación, pero que, de momento, se ha prolongado en el tiempo.