Hacer negocios es un poco más fácil en la España de 2016 que en la de 2015… O al menos eso es lo que apunta elinforme Doing Business del Banco Mundial, que evalúa 190 países y jurisdicciones. España ocupa el puesto 32, con una nota de 75,7 puntos sobre 100. Esto suponeun escalón más que en el último estudio publicado.
A la cabeza del ranking está Nueva Zelanda, que se ha convertido en el nuevo referente global a la hora de ponérselo fácil a las empresas. El top cinco lo completan Singapur, Dinamarca, Hong Kong y Corea del Sur. A continuación figuran Noruega, Reino Unido, Estados Unidos, Suecia y Macedonia.
En el top 20 también figuran Taiwán, Estonia, Finlandia, Letonia, Australia, Georgia, Alemania, Irlanda y Austria. Nuestra vecina Portugal está en el número 25, mientras que Italia ocupa el número 50 de la tabla. Grecia se queda más relegada, en el puesto 61.
Si nos fijamos en América Latina,los países que salen mejor parados son México, Colombia, Perú, Chile y Costa Rica, con los puestos 47, 53, 54, 57 y 62. Peor figuran Ecuador o Argentina (comparten el puesto 114), aunque la palma se la lleva Venezuela, que ha caído al puesto 187 de la tabla.
España avanza, pero sigue habiendo obstáculos
Desde el Banco Mundial han querido reconocer el avance de España, apuntando en su comunicado que nuestro país está entre las cinco naciones de la OCDE que han implementado más reformas exitosas a la hora de facilitar el lanzamiento y funcionamiento de los negocios.
Sobre la reforma laboral de 2012, la institución con sede en Washington apunta que su impacto aún no se ha desarrollado por completo y señala que será necesario "un esfuerzo reformista sostenido" que introduzca nuevas mejoras y ayude a reducir la dualidad laboral.
Doing Business apunta que en España hacen falta siete procedimientos para abrir una empresa, frente a 5 en la OCDE. También requerimos más tiempo: 13 días frente a 8. En términos de ingreso per cápita, el coste de emprender es del 5% en España, por encima del 3,1% de la OCDE.
Por subíndices, España apenas llega al puesto 85 en el capítulo dedicado a empezar un negocio. Esto supone un deterioro frente al informe publicado en 2015, cuando estábamos en el número 79. Peor aún es la nota que recibimos en cuanto a facilidad para obtener un permiso de obra: estamos en el puesto 113, dos puestos más atrás que el pasado año. También preocupa el puesto que alcanza España en cuanto a acceso a la electricidad (50) o la disponibilidad de crédito y financiación (62).
El ranking que recibimos en otros ámbitos es más elevado. Es el caso del acceso a mercados extranjeros (puesto 1), el grado de cumplimiento de los contratos (puesto 29), la resolución de procedimientos de insolvencia (puesto 18), la protección de los accionistas minoritarios (puesto 32) o la facilidad para pagar impuestos (puesto 37).