Banco Santander obtuvo un beneficio atribuido de 4.606 millones de euros en los nueve primeros meses del año, lo que supone un descenso del 22,5% con respecto al mismo periodo de 2015, según ha informado este miércoles la entidad, que ha achacado esta caída al impacto de varios efectos no recurrentes en el segundo trimestre de este año y en el mismo periodo de 2015.
En concreto, el banco ha explicado que la reducción de su beneficio es consecuencia de una serie de operaciones extraordinarias realizadas en el segundo trimestre, entre las que figuran los costes de reestructuración, que restaron 475 millones de euros; las plusvalías por la venta de VISA Europe, que sumaron 227 millones de euros) y un cambio en el calendario de aportación al Fondo de Resolución Europeo (que restaron 120 millones). Si se excluyen estos resultados no recurrentes y el efecto de los tipos de cambio, el beneficio ordinario del Santander aumenta un 8%, hasta los 4.975 millones de euros.
En el tercer trimestre estanco, el banco registró un beneficio atribuido de 1.695 millones de euros, un 1% más que en el mismo periodo del año anterior. Excluyendo el impacto de la depreciación de las divisas frente al euro, el beneficio atribuido aumentó un 7% respecto al tercer trimestre de 2015.
La presidenta de Banco Santander, Ana Botín, ha destacado que los resultados en los nueve primeros meses de este año son "buenos", con un millón más de clientes vinculados que confían en la entidad, que se mantiene entre los bancos líderes por rentabilidad. "La fortaleza del modelo nos permite avanzar en el cumplimiento de nuestros objetivos, pese al entorno de bajos tipos de interés en las economías desarrolladas. Este año destaca el crecimiento de Latinoamérica y del negocio de financiación al consumo", ha señalado.
Botín ha subrayado que el banco tiene "gran potencial" de crecimiento de manera "sostenible y rentable". "Hemos logrado financiar el crecimiento del crédito, a la vez que prevemos aumentar el dividendo por acción, y aumentar la base de capital más de lo previsto. La rentabilidad por dividendo es de alrededor del 5%", ha subrayado la presidenta del Santander, quien confía en terminar este año creciendo en beneficio con respecto a 2015, lo que permitirá a la entidad incrementar el dividendo por acción y el beneficio por acción.
El margen de intereses aumentó un 2% con respecto al año anterior, con crecimientos en siete de sus mercados, gracias al crecimiento de los volúmenes de créditos y depósitos, particularmente en Latinoamérica, Polonia, Portugal y Consumer Finance. Asimismo, los ingresos por comisiones crecieron un 8% con respecto al año anterior, hasta 7.543 millones de euros.
Los resultados por operaciones financieras (un 4% de los ingresos totales) cayeron un 18%, mientras que el resto de ingresos aumentaron un 13%, gracias a la buena evolución del negocio de leasing de Santander Consumer USA. Asimismo, las dotaciones para insolvencias se mantuvieron prácticamente planas en los nueve primeros meses, en 7.112 millones de euros.
En los últimos doce meses, la tasa de mora cae 35 puntos básicos, hasta el 4,15%, y el coste del crédito baja siete puntos básicos, hasta el 1,19%. El capital CET1 fully loaded aumentó en 11 puntos básicos en el trimestre y 0,42 puntos en lo que va de año, hasta el 10,47%, en línea para alcanzar el 11% en 2018.
Gana un 11,1% menos en España
Europa aportó el 56% de los beneficios del grupo (Reino Unido, 19%; España, 14%; Santander Consumer Finance, 13%) y América, el 44% (Brasil, 20%; México, 7%). En concreto, la prioridad de Santander España sigue siendo aumentar la vinculación de clientes y mejorar la calidad de servicio. Según la entidad, los bajos tipos de interés afectan al margen de intereses, aunque este impacto se compensa parcialmente con el crecimiento de los ingresos por comisiones, el control de los costes y la significativa mejora en la calidad del crédito.
El banco logró un beneficio atribuido de 785 millones de euros, un 11,1% menos. El beneficio atribuido ordinario, que excluye la aportación al Fondo de Resolución Europeo del segundo trimestre de este año, fue de 885 millones de euros, un 0,2% más. El margen bruto alcanzó los 4.429 millones de euros, un 8,5% menos, mientras que los costes de explotación se situaron en 2.495 millones de euros (-3,1%) y dotaciones para insolvencias totalizaron 500 millones de euros (-40,1%).